Las Capitales más Cool del Mundo

Si piensas que en España esta haciendo frío, imagínate vivir en una de las capitales más frías del mundo.

En algunas partes de escocia se han alcanzado temperaturas de hasta -22 ºC la semana pasada.

Sin embargo, no todos ansiamos el calor. Con bajas temperaturas que ahuyentan a aquellos que desean sol y playa, estas frías ciudades son una buena opción para evitar las masas turísticas veraniegas. Así que si  pretendes visitarlas en invierno, asegúrate de preparar buena ropa de abrigo y algún que otro termo.

1.  Astana (Kazajistán) -52 ºC

La capital, Astana  (hasta 1997 era Almaty) es famosa por su arquitectura futurística; una visita al Palacio de la Paz, al Palacio Presidencial AK Orda, o a la Mezquita de Nur Astana, debería estar en el itinerario de cualquier visitante. El monumento  Bayterek, una torre de observación de 105 m, es un símbolo de la ciudad que representa  un mítico árbol de la vida, un álamo, un pájaro mágico de la felicidad, llamado Samruk,  y su huevo. Además, en invierno podemos encontrar gran cantidad de vuelos baratos y ofertas de viajes de compañías que operan estos destinos.

Recomendación: No usar el bañador “estilo Borat” durante los meses de invierno!

2.  Ulan Bator (Mongolia)  -49 ºC

Ulan Bator fue fundada en 1639 como centro de monasterios budistas y, en el siglo XX, se convirtió en un gran centro manufacturero caracterizado por sus amplios bulevares y plazas, y arquitectura de estilo soviético de mediados del siglo XX. Situado a las orillas del río Tuul, está rodeada de cuatro montañas sagradas, con densos bosques de pinos en las laderas del norte y estepas verdes en el sur. Los veranos traen calor a la ciudad, pero los inviernos son tan severos que conviene ponerse el típico ropaje de pelo de camello usado por los lugareños, famoso por su calidez. Es la capital asiática más barata para los trabajadores extranjeros.

3.  Minsk (Bielorrusia)  -40 ºC

Minsk es la capital y ciudad más grande de Bielorrusia, además es sede de la Comunidad de Estados Independientes. Actualmente es una gran metrópoli con una arquitectura predominante de la época soviética, aunque también con edificios modernos que datan de después de la caída de la URSS. Conocida por sus gentes amables, calles limpias y frondosos parques, ofrece calles no repletas de turistas y muchas ofertas para el visitante cultural. El Circo de Misk es una buena opción para visitar, en especial para los niños. Los adultos pueden ir a la opera o al ballet, por mucho menos de lo que costaría ir en otras ciudades de Europa. A los bielorrusos les gusta bailar; no dejes de visitar y llevar zapatos de baile a uno o varios nightclubs.

4.  Ottawa (Canadá)  -37 ºC

Los canadienses están acostumbrados al frío, sacando partido del clima helado para su deporte nacional: el hockey sobre hielo. Visita el Scotiabank Place, sede de los Ottwa Senators (Equipo profesional de hockey de la ciudad). Si estás realmente interesado, siente el hielo tú mismo en el Canal Rideau,  patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. Es un punto turístico importante de la ciudad, con diversos senderos y paseos arbolados y parques en sus proximidades. Divide a la ciudad y es navegable entre mayo y septiembre, que es el período más caluroso. Durante el invierno, el canal permanece congelado hasta siete metros de profundidad, impidiendo la navegación de barcos. Con el hielo, el canal es utilizado como una inmensa pista de patinaje sobre hielo, la mayor del mundo. Conozca El Greenbelt (”cinturón verde”), construido en forma de cinturón semicircular alrededor de la ciudad, busca brindar un espacio ecológico en una ciudad moderna. En el podrá encontrar productivas granjas, áreas de investigación y extensos parques de distracción. No escasean las ofertas y vuelos baratos Canada durante el gélido invierno.

Si atendemos a la temperatura media anual, Ottawa es la séptima capital más fría del mundo. Sin embargo, si atendemos a la temperatura media de enero, Ottawa figura en tercer lugar, detrás de Ulan Bator (Mongolia) y Astana (Kazajstán).

5.  Helsinki (Finlandia) -33 ºC

La fría capital de Finlandia está rodeada por el mar y un vasto archipiélago, creando una ciudad que une la elegancia del urbanismo nórdico con una extraordinariamente bella naturaleza. Será por eso que uno de cada cuatro finlandeses vive en esta ciudad?

Hace tanto frío que el mar Báltico se congela  a mediados de invierno; incluso puedes patinar sobre él. Si prefieres la nieve al hielo, coge unos esquís de fondo y vete a las pistas de Central Park. Y si de verdad eres valiente, únete a los equipos  de natación de invierno en los campamentos Rastile, para un chapuzón realmente refrescante.

6.  Bucarest (Rumania) -32 ºC

En Bucarest  hará un poco de frío en invierno, pero cuando llega la primavera  la ciudad se descongela convirtiéndola en un destino popular. Conocida como “La pequeña Paris”, encontrarás que los precios son mucho más económicos que en la capital Francesa. Aunque no es difícil encontrar vuelos a Paris, podrás encontrar incluso mejores precios a Bucarest.  Bucarest ofrece una intrigante mezcla de arquitectura neoclásica, un casco antiguo romántico y edificios imponentes que marcan la época de control comunista. Además, en el centro de la capital hay un pequeño lago artificial  rodeado por los jardines  de Cişmigiu.

Bucarest contiene varios parques y jardines, entre ellos el parque Herăstrău (un gran parque público situado en el norte de la ciudad, y el sitio del museo Aldea) y el Jardín Botánico, el más grande de Rumania, que contiene más de 10.000 especies de plantas, muchas de ellas exóticas.

7.  Vilna (Lituania) -30 ºC

La capital de Lituania se ha beneficiado turísticamente  de ser la Capital Europea de la Cultura en 2009. La ciudad está bien preparada para disfrutar de fines de semana de invierno. Con un corto viaje fuera de la capital, se puede coger una moto de nieve para viajar a través de campos de nieve y pistas forestales. Pare en el lago congelado para ir de pesca para la cena, que puede ser preparada por su chef del hotel. Luego explora la vida nocturna y conoce a los lugareños en una de las numerosas discotecas del casco antiguo.

8.  Talin (Estonia) -30 ºC

Talin es uno de los asentamientos más antiguos de toda la región. Recibe a los visitantes de invierno con su casco antiguo medieval, que se convierte en un paraíso blanco mágico en esta época del año. Coge tus patines y deslízate  por la pista de hielo al aire libre después de un vino caliente con especias en uno de los acogedores cafés de Talin. Visítalo en invierno y evitarás los grupos de turistas que llegan a la ciudad, por su cerveza barata, durante los meses de verano.

9.   Nuuk (Groenlandia) -29.5 ºC

Con un paisaje fantástico de hielo en sus puertas, Nuuk es una de las capitales más singulares del mundo. Los visitantes pueden disfrutar de un paseo en helicóptero sobre la vasta capa de hielo de Groenlandia, visitar las ruinas nórdicas, o tomar un tour de vida salvaje en barco, para ver las ballenas en todo el litoral. El Museo Nacional, ubicado en el casco antiguo de Nuuk, cerca del fiordo, es el lugar para aprender más sobre el pasado congelado de Groenlandia y su apasionante  presente.

10.  Varsovia (Poland) -29 ºC

Una de las favoritas de los amantes de la cultura de Europa, Varsovia tiene toda la clase a la mitad de precio, en comparación con otras ciudades europeas. Alabado por su tamaño compacto, Varsovia tiene una excelente selección de museos, puntos de interés cultural como el Palacio de Cultura y Ciencia - el edificio más alto de Polonia e imponente ejemplo de arquitectura estalinista - y el edificio de  la Ópera Nacional de Polonia. Los espacios verdes suponen una cuarta parte de la superficie de Varsovia (82 parques en total), incluyendo una amplia gama de estructuras afines; desde pequeños parques en los vecindarios,  espacios verdes a lo largo de las calles y en los patios; hasta grandes parques históricos, hasta grandes parques históricos, áreas de conservación de la naturaleza y bosques urbanos en la franja de la ciudad.  Si te atreves, puedes encontrar vuelos baratos a Poloniadurante todo el invierno.

Carlos Hernández es un vagamundos apasionado, siempre dispuesto a hacer la mochila y lanzarse a la aventura. De vuelta en casa, disfruta como un niño relatándonos vivencias e historias de gentes y lugares misteriosos.