Turismo, política y futuro

Recientemente acaba de ocurrir el caso de Egipto en el cual una buena parte de la población esta protestando para que se produzca un cambio de gobierno,  el punto a analizar es si es realmente necesario cerrar los diferentes lugares turísticos, creo que esto es una forma de presionar a la comunidad internacional, sin embargo es evidente que el mayor daño que se produce es en la economía del país ya que la industria turística representa una parte importante de sus ingresos.

Si bien hay que respetar los diferentes procesos que vive cada pais tambien hay que respetar a las miles de personas que compraron con anticipacion un viaje para conocer mencionado destino y han sido canceladas, tambien las diferentes agencias y operadores de viajes que han tenido problemas por esta situacion, recordemos que todo esto son ejemplos de compromisos pasados que si el pais no asume perjudicara su imagen a futuro.

Por lo general se causa un gran malestar a los turistas que se encuentran en el país en el momento de las protestas debido a las diferentes dificultades que pueden tener para hacer sus tramites (ejemplo: permisos, visas, etc.) además del bloqueo muchos lugares turísticos resultan de cierta forma dañados físicamente debido al efecto violento de las protestas, la falta de continuidad en el mantenimiento de algunas instalaciones debido a las huelgas, etc.

Muchas veces a lo largo de la historia hemos visto como diferentes grupos humanos toman represalias contra el turismo o tratan de controlar estas zonas para imponer sus intereses, hemos visto en la mayoría de casos al final el que se perjudica es el mismo país y no solo en el presente sino en el futuro y durante muchos años, es importante separar las diferentes situaciones políticas (las cuales siempre existirán en los países) de los intereses  turísticos  para que de esta manera se pueda asegurar un desarrollo sostenible que asegure el futuro del turismo.