Comer para Perder – Los Falsos Conceptos sobre el Colesterol

El colesterol quizás ha sido uno de los conceptos peor entendidos dentro de los planes nutricionales en todo el mundo. Es muy común escuchar que aún muchos profesionales de la salud y educadores en general a distintos niveles hacen hincapié en la necesidad de disminuir los niveles de colesterol "a toda costa".

Hay que mencionar que efectivamente el colesterol y los triglicéridos son sustancias de nuestro cuerpo que cuando rebasan cierto límite indican un metabolismo alterado, y un riesgo incrementado para desarrollar diversos tipos de enfermedades como diabetes, arterioesclerosis, síndrome metabólico, obesidad, enfermedades cardiovasculares, etc. Pero ni el colesterol, ni los triglicéridos son por si mismo ni tóxicos, ni dañinos.

El colesterol y los triglicéridos son componentes naturales de nuestras células "indispensables" para la estructura correcta de la membrana celular y para la formación de hormonas como estrógenos, glucocorticoides, testosterona, etc. Es decir, el colesterol y los triglicéridos son tan necesarios como las proteínas, los carbohidratos, las vitaminas y el agua misma.

Ahora el problema es que prácticamente se ha convertido en sinónimos el colesterol con alimentos como los huevos y la carne, y a su vez estos con la grasa. Y como la grasa es prácticamente una etiqueta de algo nocivo, indeseable y prohibido, entonces hemos convertido en nuestra mente al colesterol en algo nocivo, indeseable y prohibido también.

Pero como el colesterol, las grasas en general son necesarias para la correcta estrucutra y función corporales. Los prejuicios sobre el papel de los huevos y la carne sobre la cantidad de colesterol y grasa en el cuerpo dejan de lado algo importantísimo, y es que también se generan grasas a partir de los carbohidratos en exceso y de los alimentos procesados por lo tanto en lugar de suprimir los alimentos que contengan colesterol y grasas en general aquí hay algunos tips para aprovecharlos de la mejor manera en el cuerpo y eliminar el exceso:

1. ¡Beber agua, no refresco! ¡Agua, no cerveza! ¡Agua, no jugos embotellados! ¡Agua, agua, agua!
2. Elegir carnes y aves de corral así como huevos órganicos, así como oleaginosas como nueces crudas, aceite de coco y de oliva y por su puesto frutas, verduras, vegetales, es decir alimentos que sean naturales no procesados.

Y definitivamente moverse, quemar esa grasa en exceso, pero dejar que la grasa necesaria vaya a donde tiene que ser utilizada.

Si te interesa profundizar en esta información te recomiendo conocer el plan <a href="http://www.dietasrapidasyefectivas.com/">Comer para perder</a>.