Como usar unas bolas chinas

Muchas mujeres cuando se tienen que poner unas bolas chinas no saben cómo hacerlo, hay unas pautas que se pueden seguir al colocarlas, de hecho es muy parecido a la colocación de un tampón.

Es necesario estar relajadas y tomarse su tiempo. Los nervios hacen que tus músculos se tensen y entonces es mucho más difícil de introducirlas porque sin querer hacemos fuerza. En primer lugar, la higiene es muy importante, lo primero que tenemos que hacer es lavarnos cuidadosamente las manos y después buscar la posición que sea más cómoda, la misma que cuando te introduces un tampón: sentada en el W.C con las piernas separadas,  inclinada con las rodillas separadas y un poco flexionadas, de pie colocando un pie en el W.C y la otra pierna estirada, o tumbada en la cama con las piernas abiertas… etc.

1.- Para que las bolas se introduzcan con facilidad y sin resistencia, les podremos lubricante. El lubricante aconsejado para usar con las bolas siempre será un lubricante con base de agua, puesto que los lubricantes de silicona aunque son más deslizantes muchas veces no son compatibles con el látex y deshacen las siliconas.

La cantidad de lubricante que necesitas para la introducción de las bolas chinas dependerá de la textura y material de las bolas y la facilidad que se tenga para introducirlas. No nos tiene que dar miedo poner mucho, cuanto más lubricante se pone más fácil resulta su introducción, sobre todo las primeras veces, después con el uso ya irás regulando la cantidad de lubricante que les pones porque si pones demasiado puede que luego se resbalen y caigan, especialmente si la musculatura del suelo pélvico está un poco cedida.

2.- Sujeta la bola que vas a introducir con una mano, colocando siempre primero la que no tiene el cordón, puesto que el cordón nos servirá para estirar de él al sacarlas y usa la otra mano para abrir los labios vaginales. La vagina se extiende hacia la espalda, no hacia arriba, en esa dirección es hacia la que debes orientar la bola.

Coloca la primera bola en la entrada de la vagina y empújala hacia dentro, relájate, y sentirás como tu vagina se adapta y se acomoda a la primera bola. Si la bola no entra con facilidad, entonces inténtalo con pequeños movimientos giratorios mientras la empujas.

3.- Con la segunda ya será más fácil, vuelve a hacer lo mismo. Esta vez puede que te encuentres con el tope de la pared vaginal. No te asustes, relájate, cambia un poco el ángulo de la inserción y empuja lentamente con el dedo índice.

Ya las tenemos colocadas, no debe preocuparte que las bolas se queden dentro y no puedas sacarlas, seguramente ocurrirá todo lo contrario, nos encontraremos que la musculatura pélvica al estar cedida, no las pueda retener y se salgan una o las dos. Esto es totalmente normal, por eso te recomiendo que las primeras veces las uses estando en casa mientras haces tus tareas habituales.

La sensación de que las bolas caigan por el peso, hace que los músculos de la vagina, de forma involuntaria, se contraigan para intentar sujetarlas, en eso consiste el ejercicio y la rehabilitación. Poco a poco, con el tiempo y la constancia notarás los efectos beneficiosos del uso de las bolas chinas.

De todos modos, si siguiendo estas instrucciones no las puedes colocar o te duele consulta con tu ginecólogo.