Es el amor, ¿tu aliado o tu prisionero?
Es el amor tu gran aliado o tu gran prisionero. En el momento en que el sufrimiento toma lugar como el protagonista principal de las relaciones de pareja, entonces el amor, se está convirtiendo en prisionero. No sólo de ti, también de tu pareja, y por supuesto de la relación.
Pero finalmente, ¿qué es el amor?
El amor es un sentimiento. El amor es una emoción fuerte y poderosa que es capaz de todo y con la que estamos dispuestos hasta a morir por amor. El amor también es un concepto. Es una idea. Es un aprendizaje y es cultural y depende del contexto en el que nos movemos, así como de la edad que tenemos.
Por supuesto, que no pensamos lo mismo del amor cuando tenemos diez años, que quince, veinte, treinta, cincuenta o cuando estamos en la etapa de la tercera edad. Los conceptos del amor cambian y se modifican con el tiempo, con los años, con las experiencias, y también, en base a las experiencias de cómo nos haya ideo en la feria del amor.
El amor tiene muchas variantes, amamos a nuestros padres, amamos nuestra profesión, a nuestros hijos, parientes y amigos, pero el amor en pareja es, ese amor maravilloso y cautivador que se parece a los cuentos de hadas. En ese momento, el amor es nuestro aliado, la vida nos sonríe y queremos que esos momentos amorosos se extiendan a lo largo de toda nuestra existencia, pero pareciera que somos cortos de memoria. La vida y las relaciones no son ni planas ni lineales.
Por eso cuando una desavenencia en el amor surge, como algo normal, nos sentimos desdichados, resentidos y caemos en el otro lado de la prisión del amor. Somos muy infelices, queremos conservar nuestro estado éxtasis, pero como eso es un ideal, entonces, nos volvemos tan desgraciados, nos aprisionamos. Nos metemos en nuestra cárcel de amor, y a veces, nuestra pareja, ni lo sabe.
Necesitamos repasar y emprender un camino de reflexión sobre lo que nosotros consideramos lo qué es el amor en pareja. Tal vez, estamos llenos hasta el tope de conceptos y cuando la realidad, que siempre es cruda, nos dice, es distinto a lo que pensaba, tenemos que abrir nuestra mente, nuestra alma y nuestro corazón, para entender que estamos con una pareja humana que tiene los mismo miedos que Yo, las mismas necesidades que Yo, diferentes expectativas a las mías, pero sobre todo, que tiene formas de amar totalmente distintas a las mías.
¡Pero, no! A mi me dijeron que el amor y la relación de pareja tienen que ser tal y cómo yo lo concibo. Entonces vives llena o con un gran resentimiento hacia tu pareja. Cada persona tiene su propia percepción del mundo, y todas son válidas. Por tanto, en lo referente al amor, todas y cada una de las expresiones, conceptos y formas de relacionarse tienen un valor y una manera de expresarse.
La tuya y la de tu pareja, son igual de válidas. Las dos son igualmente importantes. Pero en realidad, en lugar de conciliar nuestras visiones del amor, tratamos de imponer la que nosotros creemos es la mejor y la única. Aquí es donde el amor en lugar de ser un acto liberador, se convierte en una prisión.
Prisión porque tiene que ser como yo lo pienso. Prisión porque tiene que darse como yo lo digo. Prisión porque tiene que volverse en las acciones que yo entiendo como amor. Prisión porque tiene que ser…
Cuando el amor tiene que ser de tal o cuál manera, siempre, siempre, siempre, se convierte en una prisión.
La experiencia del amor en pareja requiere tiempo y paciencia. Conflictos que requerimos resolver. Valores que tenemos que empatar y decisiones que tenemos que lograr de manera equitativa para ambos, o para la familia. Cuando existe un desequilibrio, siempre nos sentimos de alguna manera aprisionados.
El amor es un acto de libertad, no de prisión. Pero en general, se nos ha enseñado que tenemos que padecerla en el amor, pero sobre todo, en el amor en pareja. Estás dispuesto a aprisionarte en la amargura y en el sufrimiento de tus conceptos sobre el amor, o finalmente, resuelves ver a tu pareja como una persona independiente que tiene una historia propia y qué también tiene sus conceptos sobre el amor…
Mejor opta por lo mejor en tu vida, ya han estado expuestos ambos, a un gran dolor y toxicidad….Es un proceso, te irás reintegrando poco a poco y paso a paso. Pero sólo tú puedes hacerlo, nadie lo hará por ti.
Gracias por leerme, mi misión e intención es la calidad de vida emocional…
Sí alguno de los temas le parecen interesantes sería bueno que me escribiera y si no, también. cecreto52@gmail.com También contamos con material electrónico en dónde abundamos más sobre este tema y cómo superarlo.
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Ana Giorgana
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