El amor son atenciones...

Son personas que se encuentran enamoradas del amor.  La expresión de los sentimientos y cubrir sus necesidades de atención son suficientes para sentir que aman y son amados.

Viven sus relaciones esperando un cuento de hadas cada día. Su mejor actividad en la vida es pasar el tiempo con la pareja.  Son románticos e idealistas.  Prefieren una amor lleno de sorpresas y de regalos y de actos que les hagan saber qué los aman profundamente.

Es un soñador, el amor se siente, se vive, se experimenta.  Es muy positivo en el amor y en sus relaciones, siempre ve el lado bueno de la vida, le encanta hacer bromas y jugar con la vida y el sentido del humor es fundamental en su relación de pareja.  El problema es que sueña más que actuar.  Se imagina y se imagina y se imagina un amor de película todo el tiempo, lo que también, lo vuelve susceptible.

Sus expresiones afectivas son efusivas, explota de emoción y no puede esconder sus verdaderos sentimientos tanto de amor como de molestia. Sus lenguajes son desbordantes: “ te amo apasionadamente”.   Claro que así exigen que el otro, como ellos demuestran su amor. Son muy animados y no toleran la tristeza de los demás.

Su vida afectiva es intensa cuando se sienten amados, pero también, cuando se sienten desilusionados, que es con suma frecuencia, porque quieren lo divertido y apasionante en todo momento.  No enfrenta los problemas y conflictos de frente, generalmente se escabulle pensando o justificando sus conductas.  El problema es que en cuanto a las relaciones de pareja, siempre encuentran la forma de no pasarse muy bien, porque la pareja es responsable por su mal humor, etc.

En cierto sentido todo lo exagera, pero tratándose de la vida afectiva y de la pareja aún más. Esto es, porque su amor es lo más grande y maravilloso que tiene, por lo mismo, todo lo que pase en su vida afectiva lo exagera de una manera escandalosa.

Su vida tiene que ser divertida, no importa sí mañana existen otras responsabilidades, lo importante es estar con la pareja, disfrutar con ella del amor, del romanticisismo, de lo mejor, de pronto pueden ser un poco superficiales en sus gustos y anhelos.

Confían plenamente en las relaciones, en la pareja, ponen una confianza ciega, por tanto no es difícil, que con el tiempo se sientan lastimados, heridos, resentidos, llenos de dolor y sufrimiento, porque su pareja, no respondió a todo lo que apostaron en la relación.

Este tipo de personas encantadoras generalmente salen muy mal libradas en su vida afectiva. Dan muchísimo, y reciben muy poco, de acuerdo a sus expectativas y fantasías. Lo mejor sería volverse un poco más realistas en el amor y en la pareja, requieren centrarse menos en la pareja, y ver más por sí mismos.

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