Latinoamérica: “Recuperación Mediocre y Crecimiento Extremadamente Bajo”

En Lima, Perú, el Fondo Monetario Internacional (FMI), por medio de su vocero, Nicolás Eyzaguirre, acaba de dirigir unas palabras a América Latina: se avecina una “recuperación mediocre y un crecimiento extremadamente bajo”. También mencionó que su economía es fuerte, pero vienen serias amenazas debido a la recesión que se avecina en el mundo. Si se quiere seguir el buen rumbo, Latinoamérica deberá tomar medidas a corto y mediano plazo.

El informe es casi una copia del que se dio en Washington el pasado 20 de septiembre: se espera un muy leve crecimiento de 4.5% para 2011 y 4% para 2012.

La buena noticia es que la región seguirá desarrollándose y se mantendrán los precios de las materias primas. Sin embargo, el FMI enfatizó que Latinoamérica todavía depende mucho de lo que pase en las otras regiones. Es decir, aunque todo salga bien en Latinoamérica, si algo sucede mal en Asia, Estados Unidos o Europa, esto será suficiente para opacar o retrasar la economía. Esta situación se da debido a la fuerte dependencia de Latinoamérica con los demás países, especialmente Estados Unidos.

Toda la inestabilidad actual (léase Estados Unidos y Grecia) ha venido a afectar a Latinoamérica, ocasionando una crisis de confianza y mercados volátiles. Sin embargo, no es tan grave como parece. El FMI puso como ejemplo el “resfriado” y la “neumonía”. Digamos que Latinoamérica padece un “resfriado” y Estados Unidos y Europa tienen “neumonía”. Sin embargo, Latinoamérica deberá tratarse ese “resfriado” si no quiere que su enfermedad evolucione hasta “neumonía”.

La clave radica en saber adaptarse a los cambios. Mucho se ha hablado ya de adaptación y de globalización, pero es más difícil llevarlo a la práctica. Si Latinoamérica quiere actuar como un bloque fuerte, todos sus países deberán cooperar para facilitar su política monetaria y hacer los ajustes necesarios en sus reservas nacionales.

Además, el FMI lanzó buenos augurios para Sudamérica. No sabemos si Eyzaguirre lo dijo para quedar bien con los peruanos, pero afirmó que los países del cono sur no están tan amenazados como los de más al norte. La explicación está en que la industria minera de los países sudamericanos es muy fuerte, y los precios de esta industria se mantienen muy bien posicionados en el mercado internacional.

Ahora bien, eso no significa que Sudamérica quedará exenta de lo que suceda en Estados Unidos y Europa. De hecho, Latinoamérica depende de las materias primas para sobrevivir; y las obtiene precisamente de Estados Unidos y Europa. Entonces, si no hay acuerdos para salir adelante en esas dos regiones, todos los esfuerzos de Latinoamérica por ser una región próspera serían en balde, no importa lo que usted y yo hagamos. Claro, a menos que desde hoy y hasta mediano plazo, los organismos de finanzas públicas comiencen a tomar las medidas necesarias.

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