El capital privado como fórmula de financiación

Entre los muchos préstamos rápidos que existen en el mercado financiero uno de los más conocidos y más ahora ante el cierre del crédito continuado de los bancos son los préstamos de capital privado.

Este tipo de préstamo se caracteriza por tener la capacidad de ser capaz de resolver situaciones financieras complicadas como puede ser salir del asnef, sin disponer de ingresos demostrables en forma de nomina y bien para casos donde por endeudamiento simplemente el cliente no puede tener acceso a otro préstamo.

No obstante no son las únicas razones, estas son muchas y además diversas. Los hay que también solicitan préstamos de capital privado sin tan siquiera encontrarse en ninguna de estas situaciones financieras, puede pasar que lo único que se necesite es rapidez y de ahí que prefieran la opción del préstamo privado.

Razones para escoger los préstamos de capital privado por encima de los préstamos bancarios hay muchas pero sobre todo tienen que ver con la rapidez en la tramitación así como por no filtrar tanto a los clientes que realizan la solicitud de sus préstamos.

Otra de las características del capital privado es el hecho de que este tipo de financiación tiene un mayor coste que los préstamos bancarios.

Esto es algo que nadie lo puede negar, los préstamos privados serán siempre más caros que los préstamos bancarios, esa es la realidad, la única diferencia está en el hecho de que hay préstamos privados más baratos pero siempre que sean préstamos diferentes.

Por ejemplo, si comparamos una hipoteca bancaria con una hipoteca privada podremos ver como la privada es siempre más cara que la bancaria.

Lo mismo pasara en los préstamos personales sin aval, en los préstamos sobre vehículos...en definitiva en todos los préstamos existentes.

Y es algo normal todo hay que decirlo, el cliente no puede esperar obtener las mismas ventajas relativas al coste que en los bancos cuando las financieras privadas no pueden hacer cosas como captar depósitos o incluso comprar dinero del banco central que es lo que hacen las entidades bancarias de siempre.

El capital por tanto tiene un mayor coste ya que está más limitado y además es más difícil de obtener, no así en las entidades bancarias.

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