Leyendas de Erisia. El libro que cambió mi vida
Leer supone un placer, una forma de viajar, de vivir y de soñar. Como bien dijo Jorge Luís Borges, “El verbo leer, como el verbo amar y el verbo soñar, no soporta ‘el modo imperativo’. Yo siempre les aconsejé a mis estudiantes que si un libro los aburre lo dejen; que no lo lean porque es famoso, que no lean un libro porque es moderno, que no lean un libro porque es antiguo. La lectura debe ser una de las formas de la felicidad y no se puede obligar a nadie a ser feliz.
He tenido mucho tiempo para pensar en esto, en lo que supone un libro, en lo que uno puede llegar a sentir por ellos. A veces puede ser como un amante, otras como un hijo. Conocí una vez a una persona que me dijo "mientras mi vida esté atrapada por palabras, podré vivir feliz". No sabía lo cierta que era su divagación hasta que no empecé a leer el libro del que hoy os hablo.
La idea de que un libro pueda cambiarte la vida es bastante subjetiva, para mí fue Leyendas de Erisia - La Guerra Oscura el libro que lo cambió todo. Te recomiendo que lo busques porque créeme, puede llegar a ser muy intenso y apasionado, igual que un amante, o tan dulce y soñador como un niño pequeño.
Cuando yo conocí este libro, quedé atrapada por sus palabras, por lo intenso de la historia, y no he dormido desde entonces pensando en cómo continuará o qué significa ese epílogo. Solo desde hace dos días lo tengo entre mis manos, y he ojeado sus páginas tantas veces que creo haber perdido la memoria en sus palabras. Nunca un libro me había hecho soñar con llegar a la luna o con abrazar campos de un verde vibrante. Si la lectura es una forma de felicidad, yo acabo de encontrar el libro que más feliz me ha hecho nunca. Si tienes tiempo dedícale cinco minutos, repasa sus hojas y los sueños de la autora, que poco a poco acapararon los míos hasta hacerlos propios, porque con solo cinco minutos, Leyendas de Erisia te cambiará la vida y te hará vivir La Guerra Oscura y todo lo que ocurrió antes y después. Permíteme contarte un poco acerca de este hermoso relato que me ha atrapado.
Si alguna vez te has preguntado "¿que se siente al ser inmortal?" esa pregunta podría resolverse en cuanto leas este libro. Admito que la autora me lo hizo llegar y que no le tenía grandes expectativas, al tratarse de algo nuevo y desconocido, pero me bastó empezar a leer para empezar a preguntarme cosas, para desear con todo mi corazón saber más. La aventura de Lizaia Dairane empieza mucho antes de que lo haga la historia, pero desconozco esa parte misteriosa y oculta porque mucho me temo que la autora prefiere que tengamos nuestra propia teoría, o piensa desvelarlo más adelante. En cualquier caso las dudas no dejan de surgir del mismo modo que nace el amor. Pero cómo podría un ser inmortal entregar su alma a un mortal sabiendo que lo perderá. Lo que ocurrió después no deja de sorprenderme. Sigo intentando averiguar si Tristan sabía algo que yo o la propia Lizaia desconocemos.
Pero lo que este libro no deja ver a simple vista, lo que tardarías siglos en encontrar, es el profundo mensaje que se encuentra en su interior. A lo largo de un milenio, Lizaia aprendió a estar sola y a resolver cada problema por su propia mano, pero nadie madura sin ayuda, y quien crea lo contrario es, seguramente, el más necesitado. En el momento en que la vida le puso delante un desafío que no podría superar sola, a través de sus acciones entendí que, si quieres conseguir algo que no puedes obtener solo, otras personas pueden ayudarte.
Admito que he preguntado a la autora cómo sigue la historia, pero se ha cerrado en banda y se niega a responder a ello. Quizá en parte eso sea bueno, no me gustaría que me destripasen un libro, y menos uno del que he llegado a enamorarme.

Eva González Blanco





































Registro automático