Todo lo que queremos las chimeneas de leña

La mucha  veces que oímos hablar de chimeneas de leña, lo más común es que sea asociado al tema del  ahorro  y la sostenibilidad.
Dos excelentes razones sin duda para tomar la decisión para hacernos con uno de estos aparatos.

En un momento en que las facturas de luz están desbocadas y mantenerse caliente durante el invierno parece más un producto lujo que una necesidad básica, las chimeneas de leña se posicionan como una alternativa de ahorro a considerar muy seriamente.

Cada vez son más las gente que después de hacer números y considerar los gastos que supone mantener caliente una casa a el invierno con estufas eléctricas, entienden que invertir a una chimenea de leña  es  un medio de ahorrar varios cientos de euros cada año.

También existen quienes aducen razones de tipo medioambiental y ecológico para incorporar las chimeneas de leña para sus hogares.


La preocupación por un crecimiento sostenible y la utilización de fuentes energéticas no contaminantes forma parte del estilo de vida de un buen número de colectivos, aqui tratan de aplicar estas ideas y simples conceptos a su vida diaria.


Así, estas personas valoran especialmente el uso en el madera como combustible, porque el dióxido de carbono que libera durante su combustión no contribuye al calentamiento global, tal y como a hace el de los combustibles fósiles.


Sin embargo todas estas no dejan de ser, en definitiva, razones prácticas o motivadas por un estudio razonado. Nada que ver con lo que nos lleva a amar verdaderamente las chimeneas de leña.


Ya que lo que nos hace amarlas, lo que nos empuja a  querer poseerlas, es esa sensación de calidez y  tranquilidad que nos transmite el encender de las llamas. Esa luz baja capaz de ofrecer ambientes íntimos en los que podemos sumergirnos durante la lectura de un libro o dejarnos vencer por el sueño poco a poco, disfrutando cada pequeño instante de ese proceso.


Si no has disfrutado de los incomparables momentos que te proporcionan las chimeneas de leña, podrás encontrar buenas razones para comprar una. Pero hasta que  no la tengas si sabrás lo que es amarlas.