Emigración boliviana y atropello a los derechos humanos

Ante denuncias permanentes recibidas sobre el atropello a los derechos humanos por parte de policías españoles en Barajas hemos tomado el avión rumbo a Bolivia e hicimos el mismo trayecto de los bolivianos emigrantes para verificar cuál es el trato que reciben nuestros compatriotas en Madrid y qué hace el gobierno de Evo Morales en Bolivia para evitar este drama que afecta a miles de bolivianos que salen desesperados del país incluso cargados de sus hijos.

Casi a diario llegan a España aviones boeing  de Bolivia cuya capacidad es de aproximadamente 450 personas de las cuales más de la mitad son deportadas, las líneas aéreas que están haciendo su festín con la desgracia de estos bolivianos: Aerosur, Aerolíneas Argentinas y el LAB.

 En el avión boeing 747 que nos llevó de Madrid a La Paz, el pasado 9 de noviembre,  40 bolivianos y 12 niños fueron deportados, agotados y frustrados nos relataron en el avión  que el trato de los policías españoles en Barajas fue vejatorio, que cuando llegaron a control les hicieron cantar el “viva mi patria Bolivia”,en el retén les dijeron que si lograban “reconquistarles” al otro día les dejarían pasar a España, les obligaron a firmar la carta de deportación sin permitirles siquiera leer el documento y  les negaron un médico para dos de los niños que cayeron enfermos a consecuencia del largo viaje y de las pésimas condiciones del retén donde pasaron la noche. Estos bolivianos habían llegado a España a las 16:30 del miércoles 8 de noviembre en el avión 474 de Aerolíneas Argentinas que opera con Aerosur y fueron deportados el jueves a las 14:00 en el avión de la misma compañía que nos condujo a Bolivia.

“En Barajas pedí un médico para mi hija que no paró de llorar toda la noche porque tenía dolor de estómago, le dije al policía del retén  que yo pagaría los gastos del médico pero que por favor llamara a un médico urgente, pero no me hizo caso, me respondió que para qué venía con hijos a España. Yo ya sabía de la deportación de bolivianos y por si acaso antes de viajar fui a la embajada de España en La Paz  para informarme bien  y me dijeron que al portar pasaporte de EEUU no necesitaba carta de invitación ni ningún otro documento, mis padres vinieron la semana pasada y pasaron sin dificultad, mi hermano se casa el fin de semana en Madrid. Yo ya estuve en Roma y en Inglaterra y nunca he tenido problemas para viajar con mi pasaporte, uno de los policías del retén le grito a mi niño porque no podía llevar una bandeja, lo he pasado muy mal por mis hijos, viendo a mi niña enferma y llorando, yo sin poder hacer nada”, afirma Valentín Viveros, empresario cruceño, quien fue deportado con sus dos hijos, los 3 portan pasaporte de Estados Unidos.

Tania Morales, de 29 años, presentó la carta de  invitación pero también fue deportada,”el policía me quiso hacer firmar un documento y yo le pregunté si podía antes leerlo y me dijo que no, que sólo era algo de rutina, le dije porque nos habían metido a todos en una habitación y me gritó,  ¡siéntate ahí y no preguntes!. La gente española es muy mala, los bolivianos habíamos tenido mejores sentimientos, nos han tratado peor que a asesinos”.

Iván Alarcón dice que cuando llegó a control el policía le pidió su pasaporte y le preguntó a dónde iba y él le respondió que viajaba a Milán y que estaba de paso por Madrid “¿usted es de Bolivia? me dijo,  yo le respondí que sí, ¿sabe cantar el viva mi patria Bolivia? me preguntó otra vez y yo le dije por supuesto, y me dice a ver cante y yo le canté el viva mi patria, me dijo muy bien ahora pasa al fondo y allí te van a hacer una entrevista, me llevaron a un cuarto y uno de los policías de allí dijo ´este cuarto es un lujo para los bolivianos´. La habitación donde nos metieron a todos era aproximadamente de 6x3, allí nos hicieron firmar unos documentos y nos dijeron que no hacía falta leerlo, que era un escrito donde decía que nosotros habíamos entendido lo que ellos nos habían informado, en el momento que quise leer el documento no me dejaron al igual que a los otros compatriotas y entonces me dirigí  al policía educadamente y le pregunté cuál es su nombre para hablar con él y éste me respondió que para qué quería saber su nombre ´de todos modos te irás a Bolivia y dirás que somos unos cerdos´, me dijo".

A otro de los bolivianos que preguntó por qué no dejaban pasar con carta de invitación el policía le respondió “si quieren pasar reconquístenme que mañana yo soy el que decide si pasan o regresan a Bolivia”.

Según el relato de estos bolivianos deportados, en el retén de Barajas había más de 100 detenidos, algunos llevaban ya 5 días allí, la prisión tenía puertas blindadas, la habitación del dormitorio donde pasaron la noche tenía 10X3, que habían nueve dormitorios para todos ellos y cada uno con 4 camas de 2 pisos donde duermen 8 personas; dos baños y dos duchas, informan que faltaron camas y los policías trajeron colchones, que llevaron la cena a las 23:00 cuando los niños ya estaban dormidos y que después de cenar apagaron las luces del retén y se fueron.

Al otro día fuimos testigos de cómo embarcaron a nuestros compatriotas en Barajas de vuelta a Bolivia, vimos cómo los escoltaron con patrullas hasta el avión que nos llevaría  a La Paz, mientras nosotros subíamos por la escalera trasera los deportados lo hacían por la primera puerta con rostros agotados y de frustración, una vez  en el avión uno por uno nos relató la experiencia vivida, por fin pudimos leer  el documento de deportación que les hicieron firmar a todos donde dice  “se les niega la entrada a España porque carecen de documentación adecuada que justifique el motivo y condiciones relativas a su estancia”.

Emigrantes abandonados ante el festín de las agencias

Luego de un mes de estancia en Bolivia pudimos verificar que el gobierno de Bolivia hace poco o nada por evitar la emigración de nuestros compatriotas, ni siquiera se ha preocupado por instalar puntos de información donde al menos se advierta a los bolivianos de las consecuencias de realizar este viaje y que la información que están facilitando las agencias de viaje es falsa, no hay ninguna sanción por parte del gobierno para frenar este festín de las aerolíneas.

En Bolivia nos hicimos pasar por viajantes a España, nos aproximamos a un par de agencias para solicitar información  y nos quedamos pasmados ante la capacidad de convencimiento de estos agentes para que les compremos el billete, aseguran que para viajar a España es suficiente una carta de invitación o en su defecto comprarles un paquete de 1500 dólares que ya incluye hotel en España, e incluso te facilitan créditos para comprarles el billete a través de acuerdos que ya tienen pactados con los bancos. En cada agencia que visitamos habían bolivianos comprando billetes para España, en una de ellas un grupo de nueve bolivianos a los que les enviaban por París y les decía la agente “por aquí entran sin ningún problema” y “recuerden pedir sus cafecitos y su comidita en el avión que el billete incluye todo”, esta agencia está ubicada al lado del edificio de correos de La Paz.

El delito de portar un pasaporte boliviano

Nuestro retorno de La Paz a España fue el jueves 07 de diciembre a las 20:00 horas con Aerosur, en Santa Cruz abordamos otro boeing 747 de Aerolíneas Argentinas con aproximadamente 500 personas, la mayoría bolivianos emigrantes, llegamos a Barajas el viernes a las 15:30 y las deportaciones no se dejaron esperar, ya habían negado la entrada a la mayoría de bolivianos que llegaron antes de nuestro vuelo en un avión del LAB, según avanzaba la fila de control los apartaron a los bolivianos incluso a quienes portábamos la tarjeta de residencia española, pudimos comprobar que la actitud de algunos policías españoles con los bolivianos es prepotente y grosera, como la de una de las policías de ayer (rubia de pelo largo de la cabina 5) que nos mandó a hacer la fila por segunda vez a pesar de haberle reiterado que portábamos la tarjeta de residencia, la espera nos significó  una hora más antes de volver otra vez a control. Nos presentamos ante la policía como periodistas bolivianos para presentar queja por esta situación, pedimos  información sobre el motivo de la deportación de nuestros compatriotas y dijeron que la información era confidencial, nos remitieron al Consulado de Bolivia en Madrid. Allí se quedaron más de 300 de nuestros compatriotas bolivianos, niños incluidos, que habrán pasado la noche en aquel retén “de lujo” de Barajas, listos para ser deportados al otro día.

Texto: Rosmery Castro Quisbert