Negligencia Médica por fallo en la detección de Síndrome Compartimental
El Síndrome compartimental es una condición médica frecuentemente derivada de la realización del trabajo, pudiendo así mismo aparecer tras accidentes de tráfico y otros eventos que pudieran derivar en lesiones traumáticas.
Podría, así mismo, desarrollarse de forma crónica por la realización de actividades que hicieran uso intensivo de ciertos músculos, por ejemplo de carácter deportivo.
Tiene lugar cuando los nervios y vasos sanguíneos de una cierta parte del cuerpo o área muscular (por lo general los brazos, las manos, las piernas, las nalgas o el abdomen) quedan sometidos, dentro de un espacio cerrado, a una presión considerable (derivada por ejemplo, de una inflamación o hemorragia interna).
Como vamos a ver, su tratamiento y corrección es posible siempre que éste sea detectado a tiempo. Un fallo de diagnóstico podría, en este sentido, tener consecuencias terribles, pudiendo ser constitutivo de negligencia médica indemnizable.
Los síntomas de esta dolencia y su tratamiento
La persona que padece este síndrome suele presentar un cuadro sintomático que podría incluir:
- Dolor, que podría parecer desproporcionado en relación con la herida sufrida (y de la que se derivo la inflamación o la hemorragia interna).
- Pinchazos.
- Disminución de la sensibilidad y posible parálisis en algún miembro.
- Aspecto muy característico de la zona donde éste se sufre, con aspecto pálido, brillante y terso de la piel.
- Debilidad en la zona.
Una vez detectado, lo más frecuente es que requiera de una intervención quirúrgica de urgencia, denominada fasciotomía, consistente en la apertura del tejido con la finalidad de liberar la presión a la que se ve sometida la zona del cuerpo afectada.
El verdadero riesgo del síndrome compartimental. Negligencia médica por fallo de diagnóstico
Con su detección y tratamiento temprano éste podría solucionarse sin problema alguno.
Sin embargo, si se produjeran fallos o retrasos de diagnóstico, la presión continuada a la que se ven sometidos los nervios y tejidos podría causar daños irreversibles, dando lugar a parálisis permanente y, en los peores casos, determinando la necesidad de amputar el miembro afectado.
Estamos hablando de plazos muy breves, de varias horas a lo sumo, con lo que una actuación rápida es fundamental. Cualquier error por parte del facultativo médico en el examen del paciente podría dar lugar a un retraso fatal, pudiendo en ese caso su actuación ser considerada como Negligencia médica de carácter indemnizable.
Si hubieras sufrido un evento de estas características no te demores y solicita el consejo de un abogado especialista en negligencias cometidas por facultativos médicos. Él podrá asesorarte sobre tus posibilidades en caso de interponer una reclamación.
Jose Alberto Andrío Espina
www.aa-indemnizaciones.com
José Alberto Andrío Espina www.aa-indemnizaciones.com
Registro automático