Medidas para proteger el planeta
El hombre desde que introdujo el fuego, lo domina y comienza a prescindir de el para poder vivir, creó todo un sistema de mejoras en sus formas primitivas de vida, desde la Comunidad Primitiva hasta nuestros días actuales. La propia historia del hombre, contada por las etapas de evolución de sus construcciones así nos lo demuestra.
Llegar a poseer fuego; guardar agua potable para tiempos secos, y revolucionar la técnica para hacer los productos de bienes y servicios, así como propiciar las condiciones para el esparcimiento y deleite espiritual ha formado parte de su desgaste emocional y físico, su quehacer intelectual, y sus maneras empíricas de emprender el futuro, de una manera abstracta, desarrollada en un nivel elevado de tecnología, y formas y hábitos de vida.
¿Por qué el hombre conociendo lo que desea del futuro, no quiere basándose en estas formas de nuevo desarrollo para la humanidad, tomar ahora medidas enérgicas para evitar, que el planeta sea más contaminado producto a sus acciones antropizantes, que ha sido la consecuencia de una serie de acciones desde que emprendió contra el planeta desde el mismo momento en que descubre el fuego?
No podemos pensar en el fatalismo terrenal, y menos aún que los efectos Individualistas del ser humano que pueden predominar como premisa, pues todos efectos negativos traerían como consecuencia que el Planeta Tierra, pueda ser destruido… pero de hecho somos optimistas, y pensamos que en el futuro no lejano, la realidad se imponga, la verdad y la conciencia de los hombres también, y las medidas y acciones concretas se puedan llevar a efecto.
No podemos pensar que las profecías Bíblicas, los salmos, y otras obras de arte, como novelas futuristas de Julio Verne, y películas como: La máquina del tiempo, Alíen I, II, III, etc., donde nos quieren demostrar un futuro incierto para el planeta, no puedan ser barridas con la integración, la hermandad, la inteligencia, y las acciones de los pueblos y países para combatir la destrucción por contaminación del Planeta Tierra.
¿Qué hacer?
Todas las acciones siempre serán pocas, junto a la gran necesidad de sufragar daños a los atrasos y modelos económicos, impuestos a aquellos países que son portadores de materia prima, pues por falta de recursos contaminan el medio ambiente, sobre todo en lo referente al vertimiento de aguas negras, sin tratamiento al manto freático.
Hace falta incrementar los aportes económicos, para eliminar el sub-desarrollo, y acelerar MACRO-estructuras que permitan mejorar las condiciones de vida del pueblo, su dominio a la naturaleza, mediante el uso de redes de infraestructuras soterradas de agua, gas, electricidad, telefonía e Internet.
Hace falta el desarrollo acelerado de la Industria alimentaría, y farmacéutica, para combatir el hambre las enfermedades y las pandemias. Es bien sabido que esos flagelos de la humanidad traen como consecuencia la expansión de formas masivas de muerte, con el detrimento de las razas humanas, y las formas lógicas de mezclas Inter.-étnicas. Así como la disminución de las manos de obras, la población mundial, y los niveles de vida.
En el mundo desarrollado son otras las medidas que se necesitan tomar para garantizar la no contaminación atmosférica, dentro de las que resalta, la protección de las Industrias, autos, contra la emanación de gases contaminantes, el tratamiento de los desechos sólidos, el no uso de armas bacteriológicas, de neutrones, ni atómicas, y un ahorro de la energía, así como materias primas.
Solo de esta forma seremos realistas, ante las profecías bíblicas, solo de esta manera de actuar seremos ante dios, mejores cristianos, para lograr del paraíso terrenal, mientras tengamos vida, un lugar mejor donde el primer mandamiento bíblico sea lo más cumplido posible: Ama al prójimo como a ti mismo…
Sólo de esta manera seremos seres humanos razonables, y podremos comenzar a mirar el futuro, con la óptica de que deseamos un mundo mejor en el futuro, pero que debe ser comenzado a ser salvado, para preservarlo, desde los días de hoy…..
Arq. Guillermo Morán Loyola.
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