Nombres que damos a los extranjeros en España
Los españoles llamamos a los extranjeros con distintos nombres, que siempre tienen algo de despectivo y una chispa de humor, pero esto es normal en todas los países.
Siempre se mira al extranjero como un ser raro porque no tiene nuestras costumbres, y nos permitimos ponerle apodos que siempre tienen algo de despectivo y algo de guasa.
A los ingleses y a todos los que hablan ingles les llamamos Guiris, que viene de la pronunciación españolizada del "where is" con que siempre empiezan a preguntarnos por algún lugar. Para otros, la palabra guiri tiene un origen etimológico distinto. Por extensión, se les llama Guiris a todos los turistas que visitan España y que nos dejan buenos ingresos, que sería de agradecer; pero despiertan nuestra hilaridad con su conducta:
- Llevan colgadas cámaras caras y fotografían todo lo que ven.
- Visten estrafalarios sombreros y frecuentemente calzan sandalias con calcetines.
- Siempre van con un mapa en la mano y lo despliegan en la calle para mirarlo.
- Al menor contacto con el sol, adquieren un color rojizo en la piel, por lo que también se les llama "pollo frito" ("Mira, el guiri de ayer hoy ya está como un pollo frito")
- Acompañan con coca-cola el cocido o la paella.
- Creen que todos tenemos que hablar su idioma, pero cuando los españoles vamos a sus países, nadie nos responde en español.
- Se quejan de todo, de cualquier cosa por insignificante que sea. ("Me dijeron que siempre había sol y ayer estuvo nublado por la mañana")
- Se sorprenden por todo, hasta por cosas en las que tu ni siquiera habías reparado antes ("¡¡Oh, un farolillo aquí!!")
A los franceses les llamamos Gabachos con un sentido despectivo. Desde 1.530, en Francia les llamaban gavach, gavaches en plural, a los groseros montañeses del Sur del país que hablaban muy mal el francés (en esa Región se habla el Occitano). Desde nuestra Guerra de la Independencia contra la invasión napoleónica, les llamamos Gabachos a todos los franceses, pues eran Gavaches la mayor parte de los contingentes que venían a ocupar España. Un patriota siempre le llamaba gabacho al invasor francés. También les llamamos Franchutes.
A los del Norte de África les llamamos Moros, nombre que viene de muy antiguo, desde que los romanos establecieron dos provincias en el Norte de África: Mauritania Cesariense y Mauritania Tingitana. De Mauritania deriva el gentilicio moro, en latín "maurus".
En la Edad Media, periodo en el que convivieron las tres religiones -cristianos, moros y judíos-, el término moro no era despectivo y se utilizaba en la Literatura culta.
Si en España el término moro tiene hoy un sentido peyorativo, es por razones históricas. Aquí estuvimos 8 siglos peleando con ellos, y en la Edad Moderna, peleando contra el Moro y el Turco en el Mediterráneo.
En la Época Contemporánea, España tuvo varias Guerras con Marruecos, desde 1.859 hasta que fue derrotado el independentista Abd-el-Krim. En esas Guerras toda España quedó horrorizada con la crueldad de los moros, en especial, con el Desastre de Annual el 22 de Julio de 1.921, en el que fueron masacrados 20.000 españoles dejando sus cuerpos mutilados e insepultos para pasto de los buitres.
Pero más recientemente, las tropas moras que trajo Franco del Protectorado Español en Marruecos al principio de nuestra Guerra Civil de 1.936, cuando avanzaban hacia el Norte, siempre estaban situadas en primera fila del Ejército de Franco. Eran los primeros que entraban en los pueblos que tomaban, dónde cometían toda clase de saqueos y violaciones. La gente huía de esos pueblos cuando se aproximaban las tropas moras porque temían más a los desmanes de los moros que a los fusilamientos de Franco.
De ahí ha quedado en nuestro subconsciente colectivo el sentido despectivo de la palabra moro.
Hoy les llamamos moros a todos los del Norte de África, que son la mayor comunidad de inmigrantes en nuestro país. Sin embargo, a un árabe rico no le llamamos moro, le llamamos jeque.
A los sudamericanos les llamamos Sudacas, término que se comenzó a utilizar en la "movida madrileña" (desde la muerte de Franco hasta finales de los años 80) por contracción de la palabra sudamericano. En esos años también aparecieron otras palabras coloquiales con los sufijos "aca" y "ata", como masoca, bocata, tocata…El Diccionario de la Real Academia de la Lengua define sudaca como "adjetivo despectivo coloquial para referirse a un sudamericano" aunque mas bien habría que decir a un hispanoamericano, ya que aquí también llamamos sudamericanos a los de Centroamérica y Méjico.
A los alemanes, les llamamos cabezas cuadradas por su carácter metódico y ordenado. ("Son las 12 en punto, ahí vienen a comer los cabezas cuadradas de siempre")
A los estadounidenses, Yankys, nombre que se comenzó a usar durante la Guerra Civil de ese país en el año 1.861. A los del Norte se les llamaba Yankys y a los del Sur Sureños. Con el tiempo, los países extranjeros comenzaron a llamar a los soldados Norteamericanos "Yankys" y lentamente se les llamo así a todos los Norteamericanos.
Este nombre puede ser ofensivo, sobre todo cuando se les dice "Yankys go home!" (Yankys, váyanse a sus casas)
A los argentinos, Gauchos, y también ché, pive y boludo.
A los mejicanos, Panchitos, quizás por su Pancho más conocido: Pancho Villa.
A los peruanos, Machu-pichus.
A los italianos, Espaguetis.
A los holandeses, Tulipanes.
Y a los españoles también nos llaman con algún gentilicio despectivo. En Sudamérica, especialmente en Cuba y Argentina, nos llaman gallegos.
Pero lo que más veces me han llamado fuera de España es torero, no se si con una intención despectiva, pero yo suelto una carcajada cada vez que me llaman torero.
Ivanhoe:
http://www.relatosdeivanhoe.com

todo lo ke esta comentando usted es incorrecto, informaciones erroños , aver si puedes tener mas amplia informacion referente a (MARRUECOS Y FRANCIA )
lo ke ha comentado usted me parece lojico





































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