Los tiempos cambian, nosotros no

Es increíble. Tan sólo se me ocurre esa palabra como definición de lo que viene ocurriendo desde hace algunos años. La mayoría se introducen en nuestra vida a bombo y platillo, otros de forma sigilosa, como si siempre hubiesen existido. Incluso las personas más reticentes acaban aceptándolos porque sin ellos no son aceptados y se quedan "fuera". Sin embargo, no cabe duda de que seguimos siendo los mismos, sólo que satisfacemos nuestras necesidades de forma distinta al mismo tiempo que nos ofrecen nuevas perspectivas de nuestras necesidades. Comer, beber, desplazarse, crear, comunicarse, relacionarse... todo ello se hacía también en el tiempo de nuestros abuelos, bisabuelos o más atrás aun. La diferencia principal reside en la forma de hacerlo. Hablamos, en definitiva, de los avances tecnológicos, que actualmente son considerados imprescindibles por casi todos los sectores de la población ("¿Cómo voy a hablar con mis amigos si no tengo móvil?"), y que hasta no hace demasiado eran propios de una minoría selecta, agentes secretos incluidos. Sólo hay que recordar que unos años atrás era impensable el hecho de que casi cualquier adolescente con una capacidad adquisitiva media-baja fuese poseedor de un teléfono móvil y una o más cuentas de correo electrónico.

Internet (la Red de redes) es uno de esos avances del que cada cual hace el uso que más le conviene. La principal función de la Red es la comunicación, y uno de sus usos más populares es la comunicación de sentimientos. Seguimos teniendo corazón y éste sigue teniendo necesidades, sólo que ahora tenemos encima de nuestra mesa una ventana electrónica al mundo que amplía el número de posibilidades de forma increíble. Eso sí, teniendo en cuenta que debemos tener tanto o más cuidado que en la vida “real”, ya que de entrada no sabemos con quien estamos hablando en realidad. Puede que seamos un poco reticentes al principio, pero el "nos conocimos por Internet" ya no le suena a nadie a algo raro, sino que actúa más bien como reafirmación de las posibilidades que encierra la Red. Al que todavía no haya explorado las oportunidades que le brinda Internet en ese sentido, tan sólo necesita decidirse y quizá lo encuentre interesante, divertido e incluso útil. A veces las posibilidades que se nos brindan son realmente sorprendentes. ¿Quién se anima? ;)

Un saludo,

X. Mayugo – gerente de www.teflipo.com

Una NUEVA FORMA de RELACIONARSE

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