Feliz año
El término ‘Combis asesinas’ se viene escuchando desde antes que se empezara la construcción del ‘Metropolitano’. A buena hora se empezó con este proyecto, que ojala en un futuro no muy lejano termine con toda esta informalidad del transporte público.
Yo vivo en el distrito de Lince, y cada vez que tengo que ir a visitar a mi mamá que vive en la urbanización Pro Lima del distrito de Los Olivos, tengo que tomar una combi en la avenida Arequipa, bajarme en 28 de Julio, para luego caminar una cuadra hasta la Av. Salaverry y abordar otra combi que va hasta Ancón. Esta combi que viaja por la Panamericana Norte, me deja en el “paradero” de Pro Lima, pasando la primera y segunda entrada de Pro. Entre la segunda entrada de Pro y el “paradero” de Pro Lima, hay una avenida ancha de nombre Trapiche.
Han sido ya varias veces que me he tenido que bajar de las combis, porque al subir a ellas y empezar mi viaje, observo la esquizofrénica imprudencia del chofer para conducir el vehículo. Los cobradores de las combis parecen delincuentes salidos de la prisión, y los choferes ni que decirlo.
El día 25 de diciembre fui a saludar a mi mamá en la mañana por Navidad, y de ida tuve que hacer este penoso viaje, pero conversando con mis hermanos me dijeron que el Metropolitano llegaba hasta ese lugar. Qué bueno dije. De regreso a mi casa, mi hermano menor me mostró como tomar este servicio. Fuimos caminando por el borde de la Panamericana hasta llegar a la Av. Trapiche, cruzamos al frente (con semáforo incluido) y abordamos un ómnibus del Metropolitano de color amarillo, que son los alimentadores; nos llevó al último paradero del Metropolitano en el Ovalo Naranjal, y luego abordamos el principal, que a mi hermano lo dejó en el paradero Caquetá, y a mí en el de Canadá.
Recuerdo y me da gracia; como al comienzo de este proyecto, la gente decía que nadie iba a subir a estos vehículos por el precio de los pasajes, y ahora hacen falta los mismos por la cantidad de usuarios. También escuché decir a alguien “escobita nueva barre bien” y con un poco de cólera e indignación me preguntaba “¿Es que pretenden malograr este servicio también?”
Ojala que en un futuro no muy lejano se les prenda la lucecita a los grandes inversionistas y ofrezcan a la ciudad un servicio igual o mejor que el Metropolitano. Un servicio que cubra todos los cruses de las avenidas principales que atraviesa el Metropolitano. Canadá, Javier Prado, Aramburú, Angamos, etc. Para que de esta manera, poco a poco, sea historia lo de las ‘combis asesinas’. Y ojala que el año que viene sea el año de este gran cambio para todos nosotros que queremos vivir en orden y respeto. Un feliz año 2011
Andrés Arbulú Martínez
Registro automático