Se acabó segunda parte
A continuación presento el segundo comentario a mi pequeño artículo “Directamente del Japón” y como al final, mi muy querido amigo me formula una interrogante, al término de esta presentación, paso a dar mi comentario y mi apreciación a las interrogantes. Darío me cuenta:
“Estimado Andrés, se que te mantienes siempre muy bien de salud y eso hay que agradecer a Dios todos los días; además de ello te ha dado la oportunidad de ser un incisivo y muy bien ponderado comentarista, últimamente político, que expresa no solamente lo que “Tu opinas” sino lo que recoges de la situación sociopolítica del entorno nacional. Líneas que siempre leo atento y me entretiene, aunque muchos de los comentaristas políticos y aquellos que son periodistas, sus opiniones muchas veces pueden influir en la decisión de la gente (claro está, cuando no tienen clara su convicción o simplemente no la tienen).
Pero muy aparte de ello, quiero apropiarme por un momento de tu expresión y decir también “Yo opino” que no todo está perdido en estas elecciones, que realmente no son elecciones sino solamente la inmadurez de mucha de la población peruana que aún no aprende a reflexionar conscientemente y tomar acertadamente su decisión. Y ello me da lástima, porque llego a pensar que un país sin madurez en su población, no es realmente una nación. Entiéndase bien “Nación”. Pero reitero en mi opinión que no todo está perdido, por decirlo de alguna manera, ya que ni uno ni otro partido que aparentemente hasta el momento tienen la mayoría de votos emitidos en las ánforas, tiene mayoría parlamentaria, y por ese lado es difícil gobernar “como se quiere”. Tendrán que generar consensos multipartidarios, y quizá nuevamente nuestro país, políticamente se vea indecente por los tránsfugas que creo aparecerán, y que realmente son una lacra para la política del Perú.
Quiero dejarte con una reflexión que es más un cuestionamiento abierto para saber y conocer la ruta de todo este entrampamiento en el cual nos encontramos por culpa de muchos conciudadanos, y es la siguiente:
¿Qué sucedería si en la supuesta segunda vuelta, la mayoría de la población peruana, dentro y fuera del país (donde hay ingentes cantidades de peruanos) votara viciado? ¿Eso determinaría para los entes nacionales responsables de la organización de las elecciones y/o el Congreso de la República, el llamamiento a nuevas elecciones? ¿Habría una suerte de vacio presidencial y retomaríamos como en el entonces mandato transitorio de Paniagua? ¿Intervendría un organismo internacional a fin de ayudar a solucionar este problema?
Espero que no te cause pavor lo que te refiero y disculpa si interrumpo por un momento tú tiempo de análisis y critica sociopolítica.
Un abrazo sincero, querido amigo y hermano de siempre.
Dario.
P.D.: No sé si debo incluir “Para compartir” je, je, je. (Una bromita, no te molestes)”.
Respuesta a este comentario:
Darío: me da mucho gusto después de algún buen tiempo, recibir un comentario tuyo. Me da alegría saber que siempre estás pendiente de todas las locuras que escribo. Tus comentarios son siempre para mí de una profundidad especial. Y tienes toda la razón cuando dices que Dios es el único que nos regala salud física y mental, para poder expresar con propiedad y libertad todo lo que podamos pensar. Siempre le doy gracias a Dios por eso, y también le pido para que mis apreciaciones sean cabales y honestas. Que no permita que escriba con resentimientos. Que siempre me dé el don del análisis sincero y objetivo.
Tratando de comentar – no quiero usar el término responder, porque no creo ser la persona indicada para responder a tremendas interrogantes – yo diría más bien que esta situación anómala, se tendría que haber presentado en primera vuelta; ya que existe una significativa masa electoral que ha decidido a quien elegir. Si esto se produjera en la segunda vuelta, saldría ganando Ollanta. Porque si nos ponemos a pensar: todos los que perdieron, viciarían sus votos, y solamente elegirían los de Humala y los de Keiko, lo cual le daría la victoria a Humala.
Creo también que el problema radica en que hay muchos partidos políticos en nuestro país, a muchos de estos se les permite inscribirse en el Jurado Nacional de Elecciones. Pienso también que con esta experiencia reciente, es hora de que se aglutinen las dos fuerzas políticas en nuestro país: “los demócratas” y “los no demócratas” para que no ocurra lo que estamos viendo. Hace rato que no hubiese habido segunda vuelta.
Darío, amigo y hermano de siempre: para nada interrumpes mi humilde análisis político. Todo lo contrario me siento halagado cuando me dices que soy un incisivo y ponderado comentarista político. Favor que me haces.
Tampoco me molesta la broma de “para compartir” en realidad la intención que tengo al poner esto al final de mis artículos, es dar a entender, que si a la persona que lo lee, no le gusta para nada mi comentario – que es lo más natural - exista la posibilidad de que alguno de sus contactos por correo electrónico, si le interese el tema, entonces si el que lo lee hace uso de su sentido común: lo comparte. Ese es el motivo de “para compartir, gracias”
Darío un abrazo, y espero que no dejes de comentar lo que escribo, porque eso – tu sabes – me incentiva a seguir escribiendo. Estamos en contacto.
Andrés Arbulú Martínez
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