Los cuidados adecuados de los gatos

El gato es uno de los animales domésticos más ampliamente aceptados por todas las culturas y civilizaciones. Desde el antiguo Egipto, la humanidad ha mostrado fascinación por estas bellas criaturas de personalidad avasalladora, y que ya forman parte de la vida y la cultura del mundo entero. Una de las cuestiones por las que estos animalitos son ampliamente adoptados como mascotas es la facilidad con la que se los puede tener en un hogar no demasiado amplio, ya que se adaptan con facilidad a la vida en el interior de pisos y apartamentos. Sin embargo, los gatos también pueden aburrirse, sobre todo si quedan solos durante gran parte del día, lo cual puede dejar consecuencias fatales para nuestro mobiliario. Por este motivo, considerar el comprarle algún juguete con el que puede entretenerse nunca está de más.

La higiene es otro punto a favor de esta especie. Los gatos rápidamente aprenden dónde hacer sus necesidades si se educan adecuadamente. Este proceso no es muy complicado. La mayoría de las veces si se les ofrece una caja con piedritas (unas piedritas de diversos materiales y calidades, que tienen la propiedad de absorber los olores y humedad y pueden conseguirse en cualquier tienda de mascotas), los gatos comprenderán rápidamente que ese es el lugar para sus desechos.

Existe además un plan de vacunación que implica una serie de cinco dosis durante el primer año de vida que cubren en amplio espectro gran cantidad de las enfermedades a las que los gatos son susceptibles (incluyendo la rabia y la leucemia felina), y luego un refuerzo anual a lo largo de toda su vida. Respetando este plan de vacunación nos aseguramos que nuestro gato tenga una excelente calidad de vida y esté protegido contra infecciones. Con independencia de si el gato accede o no al exterior, debemos mantener su calendario de desparasitación al día, lo cual no sólo redundará en una mejor salud de nuestro felino sino que también evitaremos la posibilidad de contagiarnos nosotros de algunos parásitos transmisibles al ser humano.

Además, para los gatos no es imprescindible bañarlos, como en el caso de los perros, ya que mediante el atusado (autolamido) se mantienen limpios y aseados.  Manteniendo estos cuidados para gatos muy básicos, nuestro animal podrá proveernos de su afecto a lo largo de muchos años.