Mitos sobre las calderas de condensación

Quizás por desconocimiento, o simplemente por falta de costumbre, España continúa muy atrás en cuando a la instalación de calderas de condensación si se le compara con otros países de Europa como Alemania o Inglaterra

Muchas veces, la indecisión de un usuario acerca de instalar calderas de condensación se debe a que existen un serie de mitos en torno a este tipo de calderas, los cuales, en su mayoría, carecen de todo tipo de fundamento. A continuación veremos algunos de ellos:

·      & nbsp;  Una caldera de condensación es bastante cara: El precio de esta caldera ha reducido Sustancialmente en los últimos años. Por otra parte, la inversión realmente merece la pena si consideramos el ahorro de combustible que estas calderas garantizan a medio largo plazo.

Finalmente, las Comunidades Autónomas establecen desde el 2008 continuos planes renove con importantes subvenciones por la compra de este tipo de calderas.

·      & nbsp;  Son calderas incompatibles con sistemas previamente instalados: Esta afirmación es completamente falsa. Una caldera de condensación puede ser instalada sin problema alguno sustituyendo la instalación anterior, además son perfectamente compatibles con suelo radiante y radiadores. Lo único que se requiere es una buena limpieza del sistema de calefacción antiguo.

·      & nbsp;  La instalación es bastante complicada: La única diferencia existente entre las calderas de condensación y las calderas convencionales es que la primera requiere un desagüe para los restos de la condensación, el cual consiste en un simple tubo de PVC. Asimismo, su emplazamiento no es muy distinto al de las calderas convencionales, lo único realmente diferente es que el vapor que surge de la condensación puede tornarse visible en algunas ocasiones, por lo cual es aconsejable poner la salida de gases hacia un lugar donde el vapor no incomode.

·      & nbsp;  Este tipo de caldera solo tiene buen rendimiento cuando condensa: Esta afirmación también es incorrecta. Una caldera de condensación siempre presenta una eficiencia en su rendimiento que oscila entre el 94 y 108 por ciento, mientras una caldera tradicional obtiene un 78 por ciento y una antigua apenas obtiene entre el 55 y 65 por ciento.

·      & nbsp;  Estas calderas requieren radiadores más grandes: Otro mito muy alejado de la realidad. En gran parte de las instalaciones, los radiadores ya son muy grandes. Hay una ventaja marginal de alrededor del 3 por ciento que se puede obtener al incrementar el tamaño de los radiadores en el nuevo sistema, lo cual ayudaría ligeramente el regreso de agua refrigerada a la caldera u optimizaría el tiempo empleado en la condensación, sin embargo, esto es no solamente poco práctico, sino también poco rentable.