La virtud de la creatividad

Con aprecio para mi amiga Glexis Soto Rosado

¿Quieres ser una persona creativa? O, ¿Ya lo eres?  Felicitaciones en cualquiera de los dos casos. Una persona creativa tiene una chispa en sus ojos que la diferencia de quienes lo rodean, tienen ideas que solo a ellos se les ocurren y una gran tenacidad para defenderlas y para abrirse paso en la vida contra todos los obstáculos que puedan presentárseles.

Las personas creativas han contribuido, y de qué manera a producir las más grandes transformaciones del mundo por la forma en que actúan y las soluciones novedosas que encuentran a cada problema. Pero no es necesario que haya un problema para que ellas actúen sino que se anticipan a su época y plantean nuevas formas de hacer, de actuar y de pensar. Y de esa manera transforman el mundo, sin necesidad de molestar a nadie. Gracias a ellos la sociedad permanece en constante movimiento.

He aquí algunas características de las personas creativas. Si ve por ahí alguien que las tenga, dele cuerda para que siga adelante y un consejo: por nada del mundo lo trate de loco ni pretenda oponerse a sus planes, pues casi siempre consiguen lo que se proponen. Más bien únasele y triunfe junto a ella. O quién sabe, de pronto es usted el creativo… si este es el caso, entonces dedíquese a explorar y explotar su talento. Ahora sí, vamos con las características.

1. Los creativos son optimistas frente al porvenir. No es un optimismo vago ni ciego sino que se basa  en el hecho de que saben lo que tienen entre manos, creen en los resultados que pueden obtener y se lanzan a la conquista de sus sueños sin que nadie pueda detenerlos.
2. Tienen un reconocido espíritu de exploradores. Quiere esto decir que no se conforman con el statu quo ni con la forma tradicional en que se han hecho las cosas.  Son incansables buscadores de nuevos caminos y de inéditos puntos de llegada.
3. En su humanidad navega un espíritu de sana inconformidad. Nos es la clásica inconformidad rebelde y en algunos casos sin causa. La suya es una inconformidad con la injusticia, con la inequidad, con la desigualdad y con el anquilosamiento. Ellos sueñan, descubren, crean un mundo nuevo, pero no demoran en considerar que ese mundo nuevo ya se volvió cotidiano y rutinario y entonces se dedican a hacer lo que mejor saben: buscar un “nuevo” mundo nuevo y así sucesivamente.
4. Tienen en su haber algo que nunca debimos haber perdido: la inocente curiosidad de los niños y el espíritu de investigación que nos llevaba a observarlo todo, mirarlo todo y preguntar por todo.
5. Son soñadores, del tipo de quienes son capaces de soñar despiertos.  Ponen sus sueños por escrito, los recuerdan una y otra vez y luchan incansablemente hasta verlos convertidos en una grata y tangible realidad.
6. Los creativos tienen mente abierta para aprender de los demás: de su profesor de la universidad y del señor que le vende las manzanas en la esquina. Aprender, aprender y aprender es un deseo que solo es superado por la intención de innovar, crear y aplicar.