Marca personal, marca la diferencia

En el mundo caótico, frenético y estresante en el que vivimos, la importancia de ser uno mismo y marcar la diferencia sobre los demás es algo que se busca para obtener un desarrollo personal y laboral. El ser humano necesita contarle al mundo quién es, de dónde viene y a dónde va. En primer lugar, marcar la diferencia es algo que se logra en el día a día, ya sea con: la familia, los amigos o en el trabajo (más aún si pensamos en lo caro que está encontrar un empleo en un mundo globalizado, competitivo y con alta cantidad de paro). Las gran ventaja de la que se dispone en el siglo XXI es la herramienta digital, todo al alcance de la mano, a un click o a toque de pulgar, es aquí donde entra en juego el mundo digital.

 

Internet y la revolución tecnológica marcan el pensamiento, la forma de ser y de las relaciones interpersonales, ayuda en las tareas cotidianas y hace más accesible la información. Actualmente se dispone de numerosos dispositivos con los que acceder a 'la red de redes', Internet. El usuario tiene en casa ordenadores, tablets o smartphones con los que acceder a una cantidad desorbitada de información a golpe de pulgar. Según datos de 'We Are Social' el número de usuarios que tienen acceso a internet en el mundo ha aumentado un 25% este año. Se puede observar el crecimiento del número de dispositivos físicos y se comprueba en numerosas valoraciones, estadísticas o encuestas. Por ejemplo, OBS recoge en su análisis que "En 2020 más de 30 mil millones de dispositivos estarán conectados" entra en juego el 'IoT' o 'el Internet de las cosas' donde todo dispositivo estará conectado.  Debido a la gran cantidad de dispositivos y personas que los utilizan, es indispensable conocer quién somos en la red, qué opiniones se generan de nosotros o qué se conoce de nosotros en las páginas mejor posicionadas de los buscadores principales. Sin duda alguna, estáis pensando en Google ahora mismo o incluso lo estáis utilizando mientras leéis este artículo.

 

¿C& oacute;mo diferenciarnos del resto?

 

El método óptimo para marcar la diferencia, aunque no por ello infalible, es crear una marca propia, una "Marca Personal" o "Personal Brand". En pleno auge tecnológico se pueden encontrar múltiples y variadas herramientas a plena disposición del cliente. Algunas de estas herramientas son  las redes sociales, con ellas queremos dar a conocer un bagaje, contar qué herramientas se fomentan en el estudio, cosas nuevas del trabajo, investigaciones en desarrollo o proyectos actuales que queremos compartir. El día a día, que generalmente se desarrolla dentro de un ámbito laboral o de estudios, es indispensable generar un  buen branding. Sino lo hacemos, otras personas podrán hacerlo y posicionarán nuestra 'marca' de una manera errónea o equivocada, incluso pueden tirar por tierra la reputación que se ha obtenido en la vida real. Es muy importante controlar los perfiles y ver qué queremos enseñar sobre nosotros en la red. Pero también es  importante mostrar cómo somos y no crear falsos perfiles o publicar información distorsionada de la realidad. Eso sí, cada persona debe marcar el límite de lo que quiere contar. Como en la mayoría de situaciones en la vida, el sentido común es lo más recomendable para mantener la privacidad y la seguridad intactas. 

 

Se puede comprobar a diario, vivimos una nueva revolución, una nueva era de comunicación e información. El usuario se mueve a través de redes de contactos, usa smartphones para cualquier tarea, utiliza apps para desarrollar trabajos... Por este motivo, cambiar la percepción de lo que son las relaciones entre personas o interpersonales es importante, al igual que las relaciones laborales. Todo esto se mueve en la red cada vez en mayor medida. 

 

Modificar la rutina por el cambio y ver cómo influir con los conocimientos al mundo. Crear una marca personal a lo largo del proceso de aprendizaje, en el ambiente laboral y adquirir los conocimientos de las herramientas del mundo digital con las que diferenciarse de la competencia, es un valor añadido a nuestra marca. Si echamos un vistazo a las ofertas de trabajo, comprobamos una gran adaptación al cambio, vemos que las empresas buscan a sus candidatos, que las herramientas y competencias digitales están muy demandadas. Los reclutadores cada vez buscan más nuestros perfiles en la red, en concreto, un 70% según un informe de Infoempleo. Los factores tecnológicos con mayor impacto según la "Encuesta sobre el futuro del empleo" del Foro Económico Mundial en 2016, nos dice que las empresas buscan: consultores en Big Data, responsables de seguridad informática, expertos en learn analitics, gestores Cloud, ciberabogados, neuromédicos o expertos en 3D para restauración. Por lo que, la formación y la readaptación están a la orden del día.

 

Todo esto se puede plasmar en los perfiles de las redes sociales, crear un blog para contar experiencias, crear un canal de Youtube para mostrar un trabajo o aficiones, tener una web personal... Para relacionarse en el mundo laboral, se puede crear un perfil en Linkedin, Infojobs o Indeed. De esta forma se genera un perfil en red, por lo que familiares, amigos, reclutadores, empresas podrán generar un perfil nuestro y hacer un primer filtrado. Debemos tener en cuenta que según un informe de Adecco, ya hay un 77% de personas en España que afirma tener perfiles en la red para encontrar oportunidades de empleo y un 77% para establecer y mantener los contactos laborales. Pero repito, es indispensable crear un perfil basado en una realidad que apoye lo que contamos, de lo contrario se generará una mala reputación o un mal feeling sobre la marca que podría dañar nuestra imagen en la red. Y al final nuestra marca personal es uno mismo así que debemos ser cautos. Si se genera una mala imagen será casi imposible de eliminar de la red y esto puede ser tan perjudicial como no tener nuestra marca personal visible en Internet.

 

El futuro es digital, los trabajos serán digitales y se crearán nuevas profesiones relacionadas con la tecnología. Tú decides, diferenciarte o morir en el intento.