Mejora socioeconómica para América y Europa con la llegada de ciudades-fabrica a México.

Ciertamente el mundo atraviesa por un periodo de complicaciones multifactoriales que pueden ser resueltas al considerar aspectos efectivos de los diversos tipos de economías exitosas y prosperas, que adecuando, llevando a cabo de forma semejante y mejorando ciertos aspectos “ad hoc”, pueden dar iguales e incuso mejores resultados. Desde hace algunos años América y Europa presentan el problema de disminución en su dominio económico derivado de una filiación al consumo de productos de países que procuran un monopolio comercial en sus propios regímenes nacionales, tal es el caso de China, un país altamente proveedor que promueve artículos indispensables para las masas y vende a costos módicos, en su mayoría artículos tecnológicos, los cuales se vuelven cada día más importantes en nuestras vidas por sus capacidades resolutivas.

China ha desarrollado una economía poderosa derivada de un programa de reformas económicas que inicio a finales de los años 70´s el cual tenía como finalidad establecer una economía de mercado, decisión que la ha llevado a obtener una capacidad adquisitiva de 11 billones de dólares representando el 14,8% del PIB mundial. Con lo anterior sus ciudadanos cuentan con mejoras en su calidad de vida, fórmula que ha generado trabajo para todos disminuyendo problemas sociales al mínimo posible. Es de reconocerse que con esfuerzo y disciplina han conseguido cifras tan elevadas, implementando ciertos patrones en sus procesos industriales, tales como hacer que sus trabajadores coman, duerman, se casen y envíen a sus hijos a la escuela dentro de la misma empresa, siendo un modelo de negocio que promueve el rendimiento al lograr que sus empleados “vivan” dentro de las empresas y se encuentren motivados por la seguridad que adquieren con esta iniciativa.

El modelo chino pude servir como ejemplo para una nueva era en la cual la economía Americana adquiera una nueva identidad, con el desarrollo de ciudades-fabrica, las cuales establecidas estratégicamente en México, puedan lograr dar empleos suficientes al mismo tiempo que suministren al norte y sur del continente y exporten a Europa productos que actualmente tienen que cruzar desde Asia, reduciendo costos de envió y generando la tan anhelada competencia que el mundo añora ante la superpotencia de producción industrializada, la cual cuenta con un modelo resolutivo de fabricación en masa y una tendencia ideológica tecnoeconómica extremista por parte de sus habitantes.

Dicho modelo debe estudiarse y considerarse como la medida definitiva ante la situación actual para incrementar el desarrollo y progreso a nivel internacional: una autentica mejora que pude proveer insumos de mejor calidad a todos los habitantes del planeta a la par que mejore gradualmente la calidad de vida garantizando derechos humanos de forma inminente, siendo que a mayores tasas de empleo, mayor bienestar a futuro.