¿Qué cosas debo evitar si quiero quedarme embarazada?

El tabaco. Dejar de fumar tiene efectos beneficiosos sobre la salud, especialmente cuando estás intentando quedarte embarazada ya que el tabaco puede reducir la fertilidad. Además, fumar durante el embarazo se asocia a un peso bajo al nacer y a otros riesgos para el niño, como nacimiento prematuro, muerte durante el parto y síndrome de la muerte súbita del lactante. Aunque puede resultar muy difícil dejar de fumar, el embarazo es una motivación excelente para muchas mujeres. El alcohol. El exceso en el consumo de alcohol es perjudicial para la salud. Además, puede reducir la fertilidad y causar problemas al bebé en desarrollo, como un crecimiento insuficiente, trastornos intelectuales o defectos congénitos (síndrome alcohólico fetal). Por ello, se recomienda no beber alcohol a las mujeres que intentan quedarse embarazadas o a aquellas que ya lo están, sobre todo, durante los tres primeros meses de la gestación en los que se forman órganos importantes como el encéfalo. El estrés. Si quieres quedarte embarazada, lo ideal es que reduzcas al mínimo los factores que te provocan estrés y ansiedad. Come de manera saludable, practica ejercicio y descansa el tiempo recomendable. Los riesgos laborales. Algunos entornos de trabajo pueden afectar a la fertilidad o suponer un riesgo para el bebé en desarrollo. Las sustancias químicas, el plomo, los gases anestésicos y los rayos X son peligrosos, por lo que las mujeres que están expuestas de forma habitual deben consultar a su médico.

¿Qué debe saber mi médico de cabecera?

Enfermedades actuales. Si sufres alguna enfermedad, lo mejor es que consultes a tu médico antes de intentar quedarte embarazada. Algunas enfermedades pueden acentuarse por el embarazo, mientras que otras pueden repercutir en el bebé en desarrollo. Además, si tomas algún fármaco es posible que tengas que modificar el tratamiento. Si se trata de una enfermedad de larga duración, como asma, diabetes o epilepsia, o si tienes antecedentes de alguna afección importante en el pasado, como trombosis (por ejemplo trombosis venosa profunda), deberás pedir consejo especializado al médico con la máxima antelación.

La rubéola. Antiguamente, la rubéola era una enfermedad común de la infancia, pero hoy en día, casi todo el mundo está inmunizado frente a ella. Si una mujer contrae la rubéola durante la gestación, sobre todo en el primer trimestre, puede causar malformaciones al bebé en desarrollo. Antes de intentar quedarte embarazada, puedes comprobar si estás inmunizada mediante un simple análisis de sangre. Acude a tu médico y, si tienes un seguro de salud, pide cita para que te lo hagan. En caso de que tengas que vacunarte, te recomendamos que esperes al menos un mes para quedarte embarazada.

Consejo genético. Es posible que las mujeres (o sus parejas) que cuenten con antecedentes personales o familiares de algún trastorno genético o cromosómico, como fibrosis quística o síndrome de Down, tengan que acudir a un especialista para solicitar consejo genético. De esta manera recibirán información y recomendaciones para los futuros embarazos adaptados a su situación personal.

Consejos para el padre Todas las recomendaciones sobre el estilo de vida dirigidas a la mujer, como seguir una dieta sana, dejar de fumar y evitar el exceso de alcohol, también son válidas para los hombres, ya que estos factores también pueden afectar a su fertilidad. Además, es recomendable que usen ropa interior suelta. El calor excesivo puede ser perjudicial para la calidad del semen.