Tratamiento de las Venas Varicosas: Sal Epsom y otros Remedios Caseros

El tratamiento de las venas varicosas puede consistir en medicamentos tradicionales para el dolor y antiinflamatorios, pero también puede estar compuesto de remedios caseros. Los remedios caseros pueden ser eficaces en ciertos casos utilizados como tratamiento único, pero también pueden funcionar bien junto con el tratamiento convencional.

Sal de Epsom

La sal de Epsom se puede utilizar en el agua del baño o para remojar los pies afectados por las venas varicosas. Las sales, también conocidas como sulfato de magnesio, pueden mejorar las deficiencias de magnesio en el cuerpo. El magnesio es un compuesto esencial de los tejidos. También, el sulfato de magnesio será absorbido en la piel y esto resultará en una disminución de la inflamación.

Las sales de Epsom deben utilizarse en el agua del baño. Se deben agregar dos cucharadas de sulfato de magnesio a cada litro de agua. Las sales también se pueden usar en inmersiones para remojar los pies durante 10 minutos al día.

Algunos médicos de medicina alternativa recomiendan alternar el baño caliente con sales de Epsom con baños fríos, lo que mejorará la circulación sanguínea y puede reducir el tamaño de las venas varicosas. Las sales de Epsom sólo pueden ser usadas externamente y no deben ser ingeridas. Sin embargo, hay un número de aguas minerales que contienen sulfato de magnesio, pero éstas no tienen beneficios comprobados en personas con venas varicosas.

Aloe Vera

El Aloe Vera puede tener numerosos beneficios en las venas varicosas. En primer lugar, el gel puede aliviar la comezón, que es común en pacientes con venas varicosas. El gel también puede reducir la inflamación y el dolor. Cuando se masajea en la piel, el compuesto puede mejorar la circulación.

Vinagre de sidra de manzana

El vinagre de sidra de manzana es otro remedio que se puede utilizar en zonas comprimidas afectadas por varices. Este remedio popular es una de las curas más antiguas que existen para las venas varicosas. Las compresas deben aplicarse de 2 a 5 veces al día, durante al menos 15 minutos. Las venas varicosas pueden inflamarse menos. También puede ayudar a mantener las piernas elevadas mientras se aplican las compresas. El agua que contiene 2 cucharadas de vinagre también se puede consumir una vez al día y puede reducir la apariencia de las venas varicosas.

Otros remedios caseros

Además de estos tres remedios bien conocidos de la vena varicosa, hay también otros remedios populares disponibles incluyendo:

Una bebida mezclada que contenga 2 cucharadas de vinagre de sidra de manzana y 3 cucharadas de azúcar añadidas a una pinta de agua tibia puede consumirse diariamente. El azúcar puede ser sustituido por miel.

La administración de una aspirina al día puede controlar el dolor, pero el fármaco también puede tener efectos anticoagulantes, mejorando la circulación sanguínea.

El aceite de hígado de col mezclado con miel puede ser una solución tópica y debe aplicarse en las venas varicosas y dejarse durante la noche.

El ajo puede actuar como anticoagulante y mejorará la circulación de la sangre.

La pimienta de cayena puede diluir la sangre y también es beneficiosa para el flujo sanguíneo.

El polvo de pimienta de cayena puede añadirse al agua caliente y consumirse como té.