Anunciese Aquí

Registro automático

Acceder con Twitter

top articulo
twitter
facebook
Rss
lunes 09 de diciembre del 2024
Lea, publique artículos gratis, y comparta su conocimiento
Usuario Clave ¿Olvidó su clave?
¿Iniciar sesión automáticamente en cada visita?
Inserte su correo electronico

Nevando sobre los cedros

veces visto 2014 Veces vista   comentario 0 Comentarios

Nevando sobre los cedros

Mientras los copos de nieve cubrían los cedros y los camuflaban bajo un gigantesco, brillante y cegador manto blanco, me di cuenta que me había quedado solo.

Al lado de aquellos imponentes árboles de firme presencia, yo al igual que ellos me quedé inmóvil como una estatua, paralizado por el penetrante frío que entraba por todo mi cuerpo y me atravesaba como una daga afilada y cortante que me llegaba hasta los huesos.

Poco a poco, la silueta de tu menuda figura se iba difuminando a cada paso que dabas, aunque todavía se podía adivinar la redondez perfecta de tus caderas, con aquel insinuante movimiento, tan “a lo cubano”, que siempre te caracterizaba cuando caminabas con esos pasos acompasados y ese ritmo premeditado tan “marca de la casa”, que mantenías al moverte. Esos pasos que irremediablemente te iban alejando cada vez un poco más de mí, sin que yo pudiera hacer nada por impedirlo.

Mis piernas se habían quedado heladas, al igual que  mi corazón. Es curioso comprobar como el músculo cardiaco, en otro tiempo “corazón de bolero”, ahora se había transformado en “corazón de iceberg”.

También el resto de mi cuerpo se había quedado petrificado por aquel ambiente gélido que como dardo paralizante me llegaba hasta el alma, anestesiándola de tal forma, que lo único que podía sentir de ella, era su ausencia.

Y seguía nevando sobre los cedros, lentamente, fuiste despareciendo de mi vida, en silencio, hasta que llegó el día que me olvidé de ti por completo.

Ahora, cuando miro para atrás, las pocas veces que suelo hacerlo, pues no dejo que la nostalgia se apoderé de mí, ya que sería absurdo acordarse de lo que “quise que fuera, pero que nunca fue”, solo me acuerdo de los cedros, de la nieve y del frío, pero nunca de ti, hasta incluso hay veces que ya ni recuerdo tu nombre.

En mi vida sigue habiendo cedros y nieva sobre ellos, y acaban cubiertos por miles y miles de copos que los tapan, y muchas veces hace frío, mucho frío, pero ya no hay sitio para ti en mis pensamientos que al igual que mis sentimientos, también se han quedado helados por el tiempo.

Clasificación: 1.9 (19 votos)
Está prohibido copiar este artículo. Artículo.org no permite la sindicación de sus artículos.
Acerca del autor

Paco Arias.

¿Tiene comentarios o preguntas para el autor?
Artículos recomendados
Experiencia versus Diferencia
Escrito por Manuel Velasco Carretero, Añadido: 07 de Jun, 2010
En referencia a la guerra entre los poetas de la experiencia y los poetas de la diferencia, decía José Manuel Benítez Ariza en el País del 23 de octubre de 2002: "Fue un enfrentamiento muy tonto y de escasa relevancia estética. Su momento álgido coincidió con el cambio de partido en el poder, y estoy...
veces visto 3474 Veces vista:   comentarios 0 Comentarios
Carta a un entrañable amigo
Escrito por andresarbulu54, Añadido: 14 de Dic, 2009
CARTA A UN ENTRAÑABLE AMIGOAmigo:Es impresionante lo que siento al sentarme en la computadora y escribir algo. Es como si, se estuviera yendo parte de mí en estas letras, al pulsar cada tecla, las letras se van con las palabras y mis ideas a la computadora, las que luego viajaran a través del...
veces visto 3517 Veces vista:   comentarios 0 Comentarios
El Santo Grial, la leyenda
Escrito por carkelsor, Añadido: 12 de Mar, 2012
El Sant. Grial en la literatura medieval, es el cáliz sagrado que usó Jesucristo en la Última Cena y que más tarde fue buscado piadosamente por los caballeros del legendario rey Arturo. Según la tradición, el Grial lo guardó José de Arimatea, que recogió en él la sangre de Cristo crucificado. El cáliz...
veces visto 8420 Veces vista:   comentarios 0 Comentarios
SECTAS A LAS QUE PERTENEZCO
Escrito por Alejandro Rutto Martínez, Añadido: 27 de Sep, 2007
A veces, cuando miro a mi alrededor, descubro con tristeza que me he quedado solo, lamentablemente solo en algunos de mis más sagrados usos y costumbres. Y debo llegar a la dolorosa pero inevitable conclusión de que estoy inscrito en el grupo reducido de miembros de varias sectas, casi en vías de...
veces visto 3456 Veces vista:   comentarios 1 Comentarios
Ausencia
Escrito por Miguel Palacios, Añadido: 30 de Dic, 2008
Cuando veas una hermosa frase, que despechada flota en el espacio...¡Ahí estaré Yo!   ; & nbsp; &nb sp;   ; & nbsp; &nb sp;   ; Cuando veas un verbo furibundo,que dormita olvidado en el espacio...¡Ahí estaré Yo!, &nbs p; &n...
veces visto 2509 Veces vista:   comentarios 0 Comentarios