Olite

Olite es una pequeña ciudad perteneciente a la Comunidad Foral de Navarra, y es conocida principalmente por su magnífico castillo: el Castillo Real de Olite, o Palacio de los Reyes de Navarra.

Olite está situada próxima al centro geográfico de Navarra, a unos 42 kilómetros al sur de su capital Pamplona. Es recomendable recorrer sus estrechas calles de aire medieval con sus caserones de piedra, sus escudos de armas y sus grandes alerones de madera.

También merece la pena una visita a las numerosas bodegas y viñedos de Olite y sus alrededores, ya que esta es tierra de buenos vinos.

Pero como hemos comentado antes, la visita estrella de Olite es su castillo. Se trata de una construcción de carácter cortesano y militar, prevaleciendo los aspectos residenciales, por lo que lo correcto sería llamarlo “Palacio” en lugar de “Castillo”.

Uno de los principales encantos del palacio es su diseño desordenado, consecuencia de las continuas obras de ampliación y remodelación que ha sufrido a lo largo de los siglos. La mayor parte de la construcción se realizó durante los siglos XIV y XV, cuando el entonces rey de Navarra, Carlos III “El Noble”, decidió convertir el palacio en sede real permanente. Las altas murallas y numerosas torres confieren al palacio una silueta espectacular que le ha llevado a conseguir el premio a la primera de las 7 maravillas medievales en España.