Volver a correr

Los pies son una de las partes del cuerpo más trabajan, soportan todo nuestro peso, trabajan sin respiro, nos traen y nos llevan,  por ello tampoco es extraño que sean también un termómetro de nuestras deficiencias vitamínicas, minerales o de conducta.

Muchas de las dolencias que podemos padecer son consecuencia indirecta de estas carencias y en algunos casos es necesaria la cirugía.

Los carbuncos

Los carbuncos se deben a deficiencias de hierro o vitamina C en nuestra sangre, el pie de atleta, esas grietas dolorosas y desagradables son consecuencia de una deficiencia de Manganeso en nuestra dieta alimentaria. Diferentes dolencias pueden aliviarse y curarse atendiendo a nuestra dieta, pero otros casos deben ser revisados por un especialista, dolencias como la metatarsalgia, esos dolores que sentimos al caminar en la zona próxima a los dedos.

Fascitis Plantar

Las Talalgias, las más conocidas son el “Espolón Calcáneo” y la “Fascitis Plantar”. El Espolón Calcáneo es un bulto anormal en la zona ósea del talón. La Fascitis Plantar es una inflamación de la Fascia Plantar, ese tejido conectivo que sostiene a modo de cuerda el arco que forma la planta del pie.  En cualquiera de estos recomendamos consultar con un especialista, realizar las pruebas pertinentes y antes de nada obtener un diagnóstico.

En el Centro de Podología – D.P. José Manuel BRU son especialistas en Estudios Biomecánicos deportivos y de la Marcha y sus distintas patologías.  Un sobrino mío que se dedica a la Marcha profesional tuvo que acudir por unos dolores que no le permitían correr normalmente.  Pude conocer de primera mano todo el proceso para determinar exactamente la dolencia y su posterior tratamiento.

Le hicieron una Valoración Biomecánica, un conjunto de pruebas funcionales para obtener los diferentes parámetros musculares, articulares y funcionales que permitan un correcto diagnóstico. Estas pruebas se apoyaban en una avanzada tecnología informática con lo que se llegaba hasta umbrales que con las exploraciones habituales son difícilmente detectables.

El diagnóstico era Fascitis Plantar, le aplicaron un tratamiento correctivo mediante unas plantillas que confeccionaron con el molde de su pie, tuvo que seguir un programa de ejercicios musculares y después de un mes puede correr de nuevo sin problemas.