Mjolnir, el martillo de Thor

Puedes saber  o no que Odín tenía dos cuervos que recorrían el mundo de día y que le relataban todo lo que había ocurrido en el mundo cada noche. Puedes saber o no que tenía una lanza, regalo de Loki, que fue forjada por los enanos.

Pero lo que estoy seguro que sabes es que Thor blandía…

…un martillo.

Ese martillo se llamaba Mjolnir, y era temido por los enemigos de Thor, por las criaturas del inframundo y por los gigantes…y también amado y respetado por quienes adoraban a esta deidad guerrera. Es por sí solo un símbolo en la leyenda nórdica, mitología y simbolismo.

Sin embargo Thor tenía otras facetas, menos conocidas que su papel de guerrero y defensor de Midgard, a las que se entregaba en cuerpo y alma. A diferencia de Odín, Thor tiene un marcado carácter protector, lo que hizo que fuese adorado por muchos campesinos y hombres pacíficos que rezaban por alguien que velase por el bienestar de su familia. Además, Mjolnir, el Martillo de Thor, es un símbolo relacionado con la fertilidad; en algunos dibujos y grabados se puede ver el martillo en el regazo de una novia a modo de ritual de fertilidad, y como una interacción simbólica entre el cielo y la tierra. Es el Dios del Trueno, el dios del cielo, y no hay que perder de vista que en el pasado se creía que los relámpagos en las tormentas de verano maduraban los cultivos.

Otra prueba, otro gesto simbólico que relaciona el poderoso martillo con la fertilidad, es el uso que se le daba en las consagraciones de diferentes naturalezas, donde cabe destacar su importancia en las bodas, ya que los novios tocaban el martillo y juraban sobre él su amor eterno.

Pero no todos los usos de este tremendo martillo eran tan pacíficos.

Thor es el protector de Midgard, del mundo de los mortales, y diferentes fuentes narran los peligros a los que debía enfrentarse en su cometido. Otras veces Thor utilizaba su magnífica arma contra las criaturas de Asgard; las Eddas narran sus hazañas enfrentándose contra gigantes, criaturas mitológicas como la Serpiente de Asgard, y en ocasiones empleando su ingenio en lugar de su fuerza, como es el caso de su encuentro con el enano, o con el barquero.

Este aspecto del dios es el menos conocido, y la imagen que hoy en día se tiene de Thor es más próxima a la de un guerrero fuerte como un toro y no muy avispado; pero antaño a este dios se le tenía como uno de los más sabios, capaz de enfrentarse con su ingenio a Odín o a Loki y salir victorioso, conocedor del secreto de las runas y de la magia, versado en poesía…etc.

Pero todos vemos la imagen de un poderoso guerrero musculoso, capaz de  lanzar el martillo a gran distancia, golpear y regresar a su mano. O lo imaginamos convocando una tormenta y lanzando un tremendo relámpago desde el martillo…o quizá pensamos en el guerrero más grande y temible que jamás haya nacido.

Su grandeza queda reflejada en su palacio, que es más grande de todos los palacios de Asgard, donde vivía con su esposa Sif y sus hijos en un edificio de quinientas cuarenta habitaciones. Según se relata, en este edificio acogería a los campesinos y esclavos muertos.

Nahuel Gladish

http://www.ciudaddereyes.com/cartas-desde-ciudad-de-reyes/como-hacer-que-odin-sea-tu-maestro/