Dependencia emocional
Muchas veces hemos oído hablar de la dependencia emocional pero rara vez somos conscientes de cuando tenemos un problema de este tipo. Por desgracia muchas parejas se basan más en la dependencia emocional que sienten sus miembros que en el amor mutuo que se pueden tener el uno al otro, lo cual, lejos de ser algo positivo y que beneficie, crea un clima de tensión y vulnerabilidad que a la larga perjudica más de lo que puede beneficiar.
¿En qué consiste la dependencia emocional?
La dependencia emocional se produce en el momento en el que el individuo pierde precisamente eso, su individualidad, pero concevirse a sí mismo únicamente como compañero o parte de otra persona. Esto lo que implica es que la persona se anula a si misma únicamente vive de cara al otro y por el otro. Esto no sólo supone una carga importante para quien está siendo objeto de dependencia, sino que además crea un montón de problemas a quien tiene la dependencia, que serían:
- Se sientes completamente desvalidos sin la otra persona.
- Problemas de baja autoestima, un bajo concepto de sí misma, una gran insegurida en su persona, y una infravaloración de lo que pueden ser capaces de hacer o lo que podrían lograr en la vida.
- Incapacidad de hacer nada sin la otra persona, lo que implica incapacidad de hacer nada sólos o por si mismos o tomar una iniciativa al margen de lo que pueda decir la otra persona.
- Depresión, ya que lo que puede querer la otra persona y lo que puedo desear yo es algo muy distinto y al cederlo en todo me encuentro falto de actividades satisfacotorias y de compañía que me agrade y por lo tanto falto de ilusión y estímulos.
- Atrapado en situaciones negativas: si tengo dependencia de mi pareja, seguiré con ella a pesar de que dicha persona pueda ser negativa para mí, porque no me quiera, o me utilice, o porque me maltrate o cualquier aspecto que pueda ser dañino.
- Anulación de mí misma.
- Sensación de inestabilidad, mi ánimo va a depender totalmente del otro y no de mí mismo.
- Incapacidad para luchar por mis objetivos o proyectos personales o profesionales al margen del otro...
Como vemos, no nos damos cuenta pero estos efectos se van instaurando en nuestra vida poco a poco y sin darnos cuenta. pero no sólo eso sino que también tiene repercusiones en la relación con los demás y con la propia pareja.
¿Qué repercusión tiene en mi relación con otras personas?
- Al no respetarme yo no me respetan tampoco.
- Se pueden aprovechar de mí, de mis buenas intenciones y de mi incapacidad para decir que no.
- No me tienen en cuenta.
- Si me centro en mi pareja, posiblemente pierda mis relaciones amistosas por abandono y descuido.
- Mi pareja se siente presionada y agobiada por la dependencia que se transmite en celos y posesión, o sentimiento de culpa por no estar siempre a mi lado, lo cual contribuye a su estrés, y pueda desear estar lejos de mí para librarse de esa responsabilidad.
- Daños directos de los demás hacia mí dado que mi autoestima está en sus manos.
- Exijo a los demás lo que debería proporcionarme yo mismo y puedo tratar injustamente a los otros por no estar de acuerdo conmigo o no pensar exactamente lo mismo.
- Visión de fragilidad, en general, de la cual pueden aprovecharse o responsabilizarse en exceso, ambos extremos negativos para ellos y para mí.
¿Cómo corregirlo?
Obviamente el primer paso para corregir mi dependencia sería siendo consciente de si lo estoy haciendo o no y hasta que punto. Pero además:
- Cuidado de mí mismo.
- Siendo consciente de lo que necesito y quiero y buscarlo por mí mismo, sin ayuda o empuje de los demás.
- Aprendiendo a pasar tiempo solo y comprobando que puedo llegar a tolerarme.
- Fomentando la autoestima, trabajando en mí mismo y en lo bueno que tengo y potenciando metas propias.
- Permitiendo que mi pareja también tenga su vida y no siempre esté pegado a mí.
- Fomentando más relaciones de amistad en las cuales pueda confiar y no depender, si tengo varios amigos me siento menos atada a una sólo persona.
- Asumiendo que dependencia y amor no es lo mismo, el querer estar siempre al lado de alguien no es quererle muchísimo, el amor es libre y permite que cada uno pueda realizarse como persona.
Y poco a poco podemos ir liberándonos de nuestra dependencia y tener una relación sana y ademas un buen equilibrio personal.
Psicóloga y directora del Centro Psicológico Adán en Madrid (España)
Registro automático