Social eLearning - Las redes están transformado los modelos de aprendizaje

La globalización ha contribuido a que el aprendizaje de idiomas se convierta en un interés universal, siendo el inglés el caballo ganador tanto en oferta como demanda. Bien por el comercio, las migraciones por cuestiones laborales o personales, así como el turismo internacional, la necesidad de comunicarnos con personas de otros países e idiomas ha contribuido al auge en la demanda de estudios de idiomas. En Estados Unidos, se estima que este mercado supone alrededor de 50 billones de dólares.  Pero, ¿cuál es el mejor método para aprender de un modo efectivo y entretenido?

“Teniendo en cuenta que el idioma es necesario para comunicarse, creo que el aprendizaje colectivo es una buena idea”, comenta Robert, periodista freelance. Patricia, especialista en gestión de eventos culturales, afirma que “aprender un idioma de manera colectiva, y cualquier tipo de formación en general, favorece la adquisición de conocimientos más rápidamente”. Más allá de apuntarse a un curso de inglés o de contratar a un profesor particular, se trata de aprender de manera conjunta junto a otros estudiantes, una metodología conocida y bautizada por los investigadores como social elearning.

Esta oferta está cobrando especial interés con la mejora de las tecnologías de la información, que permiten conectar a usuarios de múltiples países pero con una misma necesidad, a través de redes sociales. Bien de manera informal conociendo personas de la otra punta del mundo gracias a Facebook o incluso redes verticales como Match, bien entrando en comunidades gratuitas como Englishtown, donde el objetivo es aprovechar las clases de inglés con profesores nativos junto con el contacto con otros estudiantes. Foros, chats, lecciones conjuntas y resolución de dudas en equipo son algunos de los métodos que hoy podemos encontrar en la formación virtual y que se suman a la metodología de la enseñanza tradicional.

“He realizado varios cursos online compartiendo mi experiencia en otros ámbitos con usuarios a quién apenas conozco, pero como todos queríamos aprender, nos esforzábamos por obtener el mejor resultado”, comenta Patricia. Para Robert, la formación virtual le ofrece la posibilidad de organizarse con más flexibilidad: “Tienes la opción de hacerlo a la hora que te vaya bien, aprendes lo que te interesa porque eres tú quien busca y resuelve junto a los demás usuarios tus necesidades y dudas, y además creo que es una manera más barata y que te permite en ocasiones tener a tu disposición no sólo tu tutor o profesor, sino una comunidad que siempre está dispuesta a echarte un cable”.

El aprendizaje social virtual es una realidad que va en aumento en los últimos años. Así como la formación superior y universitaria online prospera con la evolución de universidades como la UNED o la UOC, también se suman a esta tendencia importantes escuelas de negocios que quieren hacer extensibles su oferta tradicional a través de la red. Según el Ministerio de Educación, de 1,4 millones de personas que se matricularon en 2009 en un curso universitario de primer o segundo grado, 192.571 estudiantes optaron por la formación virtual, 10.500 personas más que en 2005. También es interesante observar el porcentaje de estudiantes extranjeros que se apuntaron a cursos online frente a la presencial. Mientras en esta última hablamos de un 2,1%, observamos que el porcentaje en el primer caso es mayor, elevándose a un 4,7%.

Poner a prueba la inteligencia colectiva, como es el caso de Quora, red social que ha tomado protagonismo en las últimas semanas, es otro ejemplo de aprendizaje social. El valor potencial de aprender en la red crece día a día, gracias a la evolución de la tecnología y de las plataformas existentes, de la demanda de los usuarios y también de la necesidad de encontrar nuevas tendencias dentro del mercado de la formación que ha roto fronteras, ya que la educación ya no está entre cuatro paredes.