Propuesta en Educación en Salud Mental: mediáticamente

Para el ser humano la comunicación ha sido de suma importancia, de hecho a ello se deben sus avances en la creación de la civilización. El intercambio de ideas a través de la comunicación enriquece o debería enriquecer el pensamiento.

Las comunicaciones deberían incrementar enormemente el enriquecimiento del pensamiento mediante el intercambio de ideas. Sin embargo esto no sucede así (Douglas Rushkoff. “Media Virus”. Ballantine Books, 1996. Richard Brodie. “Virus of the mind”. Integral Press. 1996).

En paz descanse, el Papa Juan Pablo II (“Memoria e Identidad”) decía que el demonio tenía dos armas muy importantes contra la humanidad, una de ellas era precisamente la ignorancia.

La ignorancia no debemos pensarla solo como la ausencia de conocimiento, es importante también pensarla como tener el conocimiento incorrecto o falso.

En este último punto los medios de comunicación (“Media”) juegan un papel muy importante mal informando a la gente. Lo anterior lo hacen respaldados por “La libertad de expresión”, libertad que llega hasta a dañar a la sociedad que pretenden informar sin que por ello haya una restitución del daño (Werner Wolf. “Introducción a la psicopatología” Fondo de cultura económica; Frederic Wertham. “The psychopathology of comic books”. American Journal of Psychopathology, Vol. 50 No 4 Fall 1996). Sin embargo extendernos en este punto no es motivo de éste ensayo.

También en la historia de las comunicaciones existen las historias con respecto a la buena información.

En general la “Buena Información” es en base a documentales aburridos las más de las veces, o bien en divertidos programas infantiles. Es en fechas recientes que comienzan a existir documentales para adultos que son entretenidos. Estos últimos no son vistos por la mayoría de la gente. La gente aún tiende a buscar los dramas de las telenovelas o de los programas de acción, programas que su legado es discutible.

Con respecto a la Salud Mental la gente en general está mal informada a través de las películas de miedo donde los tratamientos de salud mental son empleados para torturar o aterrorizar, esto es, se les proporciona información errónea, no teniendo ninguna otra forma de información.

Por lo anterior no es de extrañar que la gente le tenga miedo a los servicios de salud mental y tenga un concepto erróneo de los mismos.

Por mencionar solo algunas películas que mal informan sobre Salud Mental son “Hell Raiser V” (el psiquiatra transformado en “malo” persigue a su paciente), “El silencio de los inocentes” (El psiquiatra se come a sus pacientes), “Halloween” (El psiquiatra busca matar a su paciente), “El encantamiento” (El psicólogo experimenta mortalmente con sus pacientes); y podemos continuar al infinito.

De hecho solo puedo mencionar haber visto una película donde el psiquiatra se comporta como psiquiatra y es de utilidad: “Sobrenatural” (Película mexicana con Susana Zavaleta, donde el psiquiatra ayuda y hasta rescata a su paciente).

Además existen infinidad de libros pseudocientíficos y novelas que mal informan a la gente (Ejemplo: Todos los libros de Dianética y cienciología) sobre los servicios de salud mental y muy pocos que hablan de la verdadera labor del psiquiatra (Ejemplos: “El alienista” y “El ángel de la oscuridad”, ambas novelas de Caleb Carr; “Mi vida entre asesinos seriales” de la Dra. Helen Morrison).

Por otro lado existen los “Reality Shows” en sus distintas versiones, una de ellas es filmar y entrevistar a la gente en su trabajo habitual. Este tipo de programas proporciona una información de mejor calidad.

Por lo anterior mi propuesta para la Educación en Salud Mental consiste en la creación de programas de televisión tanto tipo documental como “Reality Show” con el fin tanto de informar a la población sobre la salud mental, como de informar sobre los servicios de Salud Mental del Estado.

Donde los puntos importantes a tratar son desmitificar los padecimientos mentales, hacer notar de la existencia de los mismos, así como conocer los distintos profesionales de la salud mental y sus distintos tratamientos.

Derrumbar mitos tales como que la gente cree que los medicamentos son drogas, que el psiquiatra solo da medicamentos (drogas) que mantendrán al paciente “dopado” o que el psiquiatra solo da “sedantes”. Que solo existen como profesionales de la salud mental el psiquiatra y el psicólogo. Que solo recurren a los servicios de salud mental los “locos”. La peor parte, que la gente emplea los términos médico psiquiátricos para insultar; donde incluso algunos políticos han mostrado su profunda ignorancia al emplearlos en discursos ofensivos a sus contrapartes. Esto último es muy grave ya que nos habla de que tiene un pensamiento discriminatorio y ofensivo para la gente que por desgracia presenta trastornos graves como la esquizofrenia o el trastorno afectivo bipolar. Más grave por la ignorancia que demuestran nuestros gobernantes.

La suma de todo lo anterior hace que los servicios de salud mental sean poco utilizados y que los pacientes tengan un retardo de dos años hasta décadas en llegar por vez primera a un servicio verdadero de salud mental, cuando ya las complicaciones de las complicaciones han hecho verdaderos daños en la vida de las personas, donde incluso hay pérdidas de vidas e incapacidades permanentes debido a esta ignorancia.

Por lo anterior se hace necesaria la existencia de dichos programas televisivos donde se muestre una verdadera cultura de conocimiento y respecto a la salud mental.

Datos del autor: El Dr. Florencio García Rodríguez es médico general egresado de la Universidad Autónoma de Querétaro; Psiquiatra General egresado del Hospital psiquiátrico “Fray Bernardino Álvarez” y Paidopsiquiatra egresado del Hospital Psiquiátrico Infantil “Dr. Juan N. Navarro”, ha impartido clases en la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Querétaro, así como en la Facultad de Criminología de la misma universidad; ha sido copartícipe en el curso de actualización para médicos familiares impartido en la misma universidad, enseñando en el módulo de Psiquiatría. Además ha sido titular de la materia de psicopatología del grupo “Impulso” en la Universidad del Valle de Atemajac (UNIVA) plantel Querétaro, impartió el taller de “Psicología Criminal” en la misma universidad y actualmente titular de la materia de Psicofarmacología ahí mismo.