Liderazgo y comunicación Organizacional
Bien es sabido que la comunicación organizacional funcional es indispensable en estos tiempos, para el ritmo y la demanda con la que se necesita la información y los resultados o productos; pero no es únicamente esto lo que está en juego cuando se trata de la interacción entre grupos sociales, empresas o instituciones; para que la información se mueva, requiere de esfuerzo, talento y sobre todo, recurso humano de calidad que cuente con lo anterior y le dé el impulso a la información tan vital que se maneja.
Se tiene el entendido que la comunicación organizacional debe tener como efectos esperados la emisión, recepción y la compresión de información que puede ser incluso básica, pero mantenerse así dentro de una organización compleja es el reto. Dentro de las organizaciones contamos con diferentes niveles jerárquicos donde encontramos relaciones individuales y colectivas entre los mismos colaboradores y sus subordinados según aplique el flujo, coordinación en las tareas encomendadas o instrucciones. Es en este punto donde nos encontramos con los managers de cada célula, equipo o entidad de trabajo, es decir, su líder, que dependiendo de la estructura organizacional que manejen, no siempre es, precisamente el jefe.
Existen muchos jefes líderes, líderes que nos son jefes, y jefes que no tienen una pizca de líder. Se les puede ubicar en éstas o más categorías, según su actitud y aptitud principalmente. Dependiendo de cómo se comporte el líder con sus subordinados o sus semejantes, será el primer contacto que se tenga entre el tipo de liderazgo y el nivel de comunicación organizacional que se tenga. Independientemente del tipo de liderazgo que maneje o promueva el jefe ya sea autócrata, donde el jefe asume la responsabilidad de las decisiones sin embargo, dirige, motiva y controla al subalterno la comunicación entre ellos debe ser óptima, principalmente en la descendente, donde las indicaciones deben ser claras y precisas, y así el engranaje de la organización funcione como debe, acatando las instrucciones al pie de la letra o incluso mejorándolas.
Si hablamos de un liderazgo emprendedor, el punto fino de la comunicación se centra en la ascendente y descendente, incluso se podría ver horizontal entre jefe y subalternos, pues se trata de señalar directrices claras con la retroalimentación de quienes la ejecutan con un enfoque constructivo, enriqueciendo la tarea y potencializando los resultados.
Y así, podemos mencionar el liderazgo activo, audaz o incluso el liberal, si el liderazgo dentro de la organización promueve la comunicación, éste constituye un aspecto de primordial importancia para el trabajo y el desarrollo de los equipos y las organizaciones, no solamente para obtener los objetivos organizacionales programados, sino por el desarrollo integral y la satisfacción laboral que deben alcanzar todos los colaboradores, para que les permita estar preparados para los cambios, tener un mejoramiento continuo de su desempeño y de los resultados de trabajo de la organización
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