Tortura democrática

Cuando uno imagina una situación de guerra una de las peores cosas que pueden sucederle a un soldado, aparte del dolor o la muerte, es caer capturado por el enemigo.

Antiguamente, antes de las convenciones de Ginebra, esto podía suponer cualquier destino para el prisionero. Los enemigos eran tratados como tal, con crueldad. Entre los mejores finales que podían tener se encontraba la muerte rápida. Entre los peores, la tortura.

Han pasado los años pero algunas cosas no han cambiado. Las penas de muerte continúan y las torturas se han modernizado. Lo más sangrante es que estas prácticas no ocurren en lugares recónditos del planeta sino en el país adalid de la democracia, los EEUU. Cualquiera puede pensar que caer capturado por las tropas americanas es una bendición mientras que ser apresado por talibanes es la mayor de las maldiciones. Eso será si no recaes en el agujero negro de Guantánamo.

Esta cárcel que viola todos los tratados y leyes de los estados modernos está situada en Cuba y fue creada expresamente para la guerra de Afganistán. A ella sólo acuden los prisioneros que están acusados de formar parte de peligrosas células terroristas. No gozan de ningún tipo de derecho y se les somete a torturas constantes para sacarles información

Las promesas que hizo Obama durante su campaña para la presidencia no se han cumplido y este mes se cumplen 10 años de su apertura. Como de costumbre el que tiene el poder hace lo que quiere y viola los acuerdos que le interesan en cada momento. El resto del tiempo solo tiene que fingir que los respeta, hasta que desee romperlos de nuevo. Cualquier país islámico que tuviera penas de muerte, torturas y se atreviera a invadir otros estados sin la aprobación de la ONU sería enmarcado en el "Eje del mal". Es curioso ver lo que se puede hacer con una buena campaña de relaciones públicas y en pro de la democracia. La democracia para la mayoría de países solo ha traído la miseria y guerras producidas por las competencias comerciales sin escrúpulos. Por qué deben entonces ver con buenos ojos lo que les viene de fuera y actuar con amabilidad. Parece que todo término al que se le añada adjetivo "democrático" sea válido. De esta manera parece que una decisión tomada por "muchos" sea siempre la correcta. l